Juez analiza este mes extradición de 'El Chapo' a EEUU

El juez encargado de los procesos de extradición a Estados Unidos contra Joaquín "El Chapo" Guzmán analizará el caso antes de que finalice septiembre y el narcotraficante podría ser entregado a la justicia estadounidense antes de finales del año, aseguró este miércoles una fuente gubernamental estadounidense.

El juzgado decimotercero de distrito de amparo en materia penal, con sede en Ciudad de México, acordó a finales de agosto celebrar una audiencia constitucional el próximo lunes 26 de septiembre para cerrar la recepción de pruebas e iniciar el análisis del caso.

"Esperamos que el juzgado decida el amparo el 26 de septiembre. Y seguimos esperando que (Guzmán) sea extraditado antes de fin de año", dijo a la AFP una fuente del gobierno estadounidense que pidió no ser identificada.

La cancillería mexicana avaló la extradición en mayo pero la defensa interpuso dos recursos de amparo en junio para bloquear la entrega del jefe del cartel de Sinaloa a Estados Unidos, donde es requerido por cortes de Texas y California.

"El juez puede decidir o no ahí mismo, pero en estos casos lo usual es que tome su tiempo para analizar", dijo a la AFP José Refugio Rodríguez, uno de los abogados de Guzmán.

Una vez que el juez resuelva y se notifique el fallo a Guzmán, lo que puede tomar hasta dos días, la defensa tiene diez días hábiles para solicitar la revisión al tribunal colegiado.

El abogado adelantó que en caso de que la resolución sea contraria, solicitará una revisión por parte de un tribunal colegiado, y tiene instrucciones de Guzmán de ir hasta la última instancia, la Suprema Corte.

La decisión del colegiado podría tomar semanas y "no creemos que la Suprema Corte atraiga el caso, pero ello atrasaría (el proceso) hasta que formalmente anuncie que lo rechaza", añadió la fuente del gobierno estadounidense.

Guzmán, aislado en el penal

El poderoso líder del cartel de Sinaloa espera el veredicto en una cárcel de la fronteriza Ciudad Juárez (norte), a donde fue trasladado en mayo desde el penal del Altiplano (centro) como parte de un "protocolo de seguridad".

Guzmán fue recluido en el Altiplano tras ser detenido en 2014 pero al año siguiente se escapó a través de un kilométrico túnel, un duro golpe para el gobierno mexicano, y fue recapturado en enero pasado en la ciudad de Los Mochis, en su natal Sinaloa (noroeste).

Ésta fue la segunda fuga protagonizada por el narcotraficante luego de que en enero de 2001 se escapó de un penal federal de Jalisco (oeste) en el que estuvo recluido tras su primera captura, en 1993 en Guatemala.

Según declaraciones a radio Fórmula de Andrés Granados, otro de los abogados, Guzmán permanece bajo fuerte vigilancia y aislado en prisión.

"Está mal, está aislado, no sale con los demás internos a patio, no lo dejan hablar con nadie, su visita conyugal es cada 15 días y de sus abogados cada semana", dijo Granados.

Con Guzmán detrás de las rejas, uno de sus hijos y otros cinco hombres fueron secuestrados el 15 de agosto por un grupo antagónico, el Cártel Jalisco Nueva Generación, en un restaurante del balneario de Puerto Vallarta, en el estado de Jalisco (oeste), según las autoridades.

Jesús Alfredo Guzmán Salazar, de 29 años, y los otros cinco secuestrados habrían sido liberados cinco días después luego de una negociación, según un miembro de la familia Guzmán.

La fuente estadounidense explicó que existen elementos de que Guzmán hijo estuvo secuestrado unos días, aunque no hay evidencia de que en la negociación para su liberación se haya producido algún intercambio, por ejemplo de territorios, y que todo sería resultado de un secuestro "no muy bien planeado, sin un objetivo preciso