Irán detiene a varios 'cómplices' del atentado contra un mausoleo
Teherán, Irán/Irán anunció el lunes la detención de siete presuntos cómplices del tirador que perpetró un atentado la semana pasada en un santuario chiita en Shiraz, anunció la agencia de noticias estatal IRNA.
Al menos 13 personas murieron el pasado miércoles en el mausoleo Shah Cheragh en la ciudad de Shiraz (sur), según las cifras oficiales revisadas, en un ataque reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico.
Los medios estatales habían comunicado 15 muertes inicialmente.
El autor del ataque, identificado por los medios de comunicación locales como Hamed Badakhshan, falleció por las heridas sufridas durante su arresto, dijeron las autoridades.
"La segunda persona involucrada en la operación terrorista en el santuario sagrado, que brindó apoyo, ha sido arrestada," dijo el vicegobernador local Esmail Mohebipour, citado por la agencia IRNA.
El sospechoso, detenido el domingo por la tarde en Shiraz, no entró en el mausoleo, y su presunta participación no estaba clara.
Poco más tarde, el ministerio de Inteligencia confirmó en un comunicado la detención de ese "segundo elemento operativo", y también de "seis elementos de apoyo del equipo criminal terrorista", sin dar más precisiones.
El tiroteo se produjo el mismo día en que miles de personas en todo Irán rendían homenaje a Mahsa Amini, 40 días después de su muerte bajo custodia policial.
Amini, de 22 años, murió el 16 de septiembre, tres días después de ser arrestada por la policía de la moral en Teherán por incumplir presuntamente el código de vestimenta islámico que rige sobre las mujeres e impone cubrirse el cabello con un velo.
Los comentarios realizados el jueves por el presidente Ebrahim Raisi parecieron vincular el ataque de Shiraz, uno de los más mortíferos en años, con las protestas y los "disturbios" por la muerte de Amini.
En los cortejos fúnebres por las víctimas en Shiraz el sábado, la multitud coreó eslóganes culpando a Estados Unidos, Israel y Reino Unido de estar presuntamente "detrás de los disturbios".
Durante la ceremonia de duelo, el general de división Hossein Salami, jefe de los Guardianes de la Revolución, instó al "número limitado de jóvenes engañados" por los enemigos de Irán a poner fin a los disturbios.