Expresidente de Guatemala sale de cárcel en EEUU
El expresidente guatemalteco Alfonso Portillo fue liberado este martes de la cárcel en Colorado en la que cumplió una pena de casi seis años por aceptar sobornos de cerca de 2,5 millones de dólares.
Portillo fue liberado de una cárcel situada en los suburbios de Denver. Acompañado del cónsul de Guatemala en esa ciudad abordó un vuelo comercial de Denver hacia Houston y luego viajaría a su país, dijo Libna Bonilla, ministra consejera de la embajada guatemalteca en Washington.
La Agencia de Prisiones de Estados Unidos confirmó que Portillo fue liberado de una institución de baja seguridad en Englewood, donde pasó encerrado cerca de un año.
Los planes de viaje de Portillo y la fecha de su llegada a Guatemala se desconocían inmediatamente.
El expresidente fue sentenciado a cerca de seis años de cárcel en un tribunal federal de Nueva York en 2014 por aceptar un soborno de 2,5 millones de dólares. Bonilla dijo que se le conmutó el tiempo que ya había pasado preso en Guatemala, donde ya no tiene cargos pendientes.
"En Guatemala se le considera un hombre libre", dijo Bonilla.
Portillo aceptó haber recibido 2,5 millones de dólares del gobierno de Taiwán a cambio de mantener el reconocimiento diplomático a ese país.
Fiscales federales dijeron que los sobornos amenazaron la integridad de los bancos estadounidenses porque Portillo blanqueó dinero a través de instituciones financieras de ese país convirtiéndolas en "un vehículo de dinero malo". El fiscal asistente Adam Fee dijo que Portillo usó el primer medio millón para construir una casa más grande para reuniones y fiestas.
En esa ocasión el gobierno de Taiwán negó que recurriera a una diplomacia de "cuenta de cheques".
Portillo, de 63 años, gobernó Guatemala de 2000 a 2004. En 2013 fue extraditado a Estados Unidos, donde en 2014 se declaró culpable de asociación ilícita para lavar dinero.
El juez Robert P. Patterson pidió confiscarle los 2,5 millones.
Al anunciar la sentencia Patterson dijo que los actos de Portillo "fueron inconvenientes para el gobierno de Guatemala y todos los otros países que participan en la convención de Naciones Unidas contra la corrupción".