Ex primer ministro israelí Olmert, culpable de soborno
El ex primer ministro israelí Ehud Olmert fue hallado culpable el lunes de fraude y abuso de confianza en la repetición de un juicio por cargos de corrupción, el último capítulo de la caída de un hombre que hace unos años esperaba llevar al país a un histórico acuerdo de paz con los palestinos.
Los abogados de Olmert dijeron que posiblemente apelen al fallo del Tribunal de Distrito de Jerusalén. Su condena se conocerá en una vista prevista para mayo.
El ex mandatario afirmó que estaba a punto de alcanzar un acuerdo histórico con los palestinos cuando se vio obligado a dimitir a principios de 2009 en medio de acusaciones de corrupción. Su partida despejó el camino para la elección de Benjamin Netanyahu, de línea dura, y los esfuerzos de paz posteriores no tuvieron éxito.
Olmert fue absuelto en 2012 de una serie de cargos, incluyendo aceptar sobres con dinero en efectivo del empresario estadounidense Morris Talansky cuando era alcalde de Jerusalén y ministro del gobierno. Se probó que durante su etapa como alcalde recibió 600.000 dólares de Talansky, y otras cantidades en efectivo durante sus años como ministro, pero la corte no puedo encontrar pruebas de que el dinero fuese empleado para causas personales ilegales.
Ese fallo fue visto como una importante victoria para el ex mandatario, que negó ser corrupto. Fue declarado culpable sólo de un cargo menor de abuso de confianza por conceder reuniones de trabajo y contratos a los clientes de un socio de negocios, y aumentó las esperanzas de su regreso político.
Pero la ex directora de la oficina de Olmert, y confidente de toda la vida, Shula Zaken, se convirtió más tarde en testigo del estado, ofreciendo grabaciones de conversaciones con Olmert sobre la recepción del dinero, lo que provocó una repetición del proceso. En las grabaciones, se escucha a Olmert diciendo a Zaken que no declare en el primer juicio para que no lo incrimine.
Un panel de jueces del Tribunal de Distrito de Jerusalén falló el lunes que Olmert había aceptado 153.950 dólares de Talansky cuando era ministro del gobierno, y guardó el dinero en una caja fuerte con la colaboración de un ayudante.
Los jueces concluyeron que Olmert dio Zaken parte de ese dinero a cambio de su lealtad, y utilizó el dinero para su beneficio personal y sin reportarlo, tal y como exige la ley, y a cambio de favores a Talansky, calificando la situación de "grave conflicto de intereses". Lo condenaron por cargos de fraude y abuso de confianza.
El abogado de Olmert, Eyal Rozovsky, dijo que su equipo legal estaba "por supuesto muy decepcionado con la sentencia", que revisarán y probablemente apelarán el fallo.
La condena volvió a avivar la ira en Israel.
"Quiero que Ehud Olmert pida disculpas al pueblo de Israel", dijo el columnista y ex confidente de Olmert Dan Margalit a Radio Israel el lunes.
Por otra parte, Olmert fue hallado culpable en otro juicio por soborno en marzo de 2014, y condenado a seis años de cárcel. Apeló la decisión y se le permitió permanecer fuera de la cárcel hasta conocer el fallo definitivo.
En el momento de la dimisión de Olmert, israelíes y palestinos llevaban más de un año de intensas negociaciones sobre los términos de la independencia palestina. Los palestinos quieren que toda Cisjordania y Jerusalén oriental, además de la Franja de Gaza, formen un estado independiente. Israel ocupó esas tres zonas en la guerra de 1967, aunque en 2005 se retiró de Gaza.
Desde que dejó el cargo, Olmert dijo que presentó a los palestinos la propuesta israelí más generosa de la historia, dándoles casi el 95% de Cisjordania, junto con un intercambio de tierras que cubría el 5% restante. Además, propuso una administración internacional para el este de Jerusalén, que acoge los lugares religiosos más sensibles de la ciudad.
Funcionarios palestinos dijeron que, aunque se había avanzado, la evaluación de Olmert era demasiado optimista.