Ucrania evacúa a civiles ante el avance de las tropas rusas en el nordeste

Decenas de localidades de la región ucraniana de Járkov (nordeste) ordenaron el jueves evacuar a los civiles ante el avance de las tropas rusas en una zona que ya cambió de manos dos veces desde el inicio de la guerra.

El ejército ruso había ocupado la ciudad de Kupiansk y sus alrededores poco después de invadir el país, en febrero de 2022, pero fue expulsado en una contraofensiva relámpago de las tropas ucranianas en septiembre. En las últimas semanas, volvió a pasar al ataque y reivindica periódicos avances territoriales.

El ejército ucraniano aseguró el jueves que "la situación sigue siendo difícil, pero se mantiene bajo control" en la región.

"Los rusos tratan de imponerse y penetrar en nuestras defensas", agregó en Telegram el portavoz de las tropas ucranianas en el sector oriental del frente, Serguii Cherevaty.

El ministerio ruso de Defensa había indicado previamente que sus tropas "mejoraron sus posiciones en la primera línea del frente" en dirección a Kupiansk. 

Las autoridades locales ordenaron la evacuación de 37 aldeas del distrito de Kupiansk, un importante nudo de comunicaciones. La mayoría se halla cerca de la línea de frente, en la margen izquierda del río Oskil.

"La evacuación empezó ayer, cuando se firmó la orden", declaró el jueves el jefe de la administración militar de Kupiansk, una ciudad de 25.000 habitantes antes de la guerra.

Esta administración urgió por la mañana a los civiles de partir "hacia un lugar más seguro" ante "el aumento de los bombardeos".

El gobernador regional, Oleg Sinegubov, indicó que dos habitantes resultaron heridos en un bombardeo nocturno en la aldea de Kindrashivka, una de las afectadas por las órdenes de evacuación.

Mostró, además, la foto de un edificio administrativo que fue blanco de un ataque en Kupiansk, aunque aseguró que en ese caso no hubo víctimas.

Según mapas rusos, las tropas de Moscú estarían a pocos kilómetros de la ciudad.

Bombardeos "cotidianos" en Zaporiyia

Ucrania inició en junio una contraofensiva tras recibir un importante refuerzo militar de las potencias occidentales, pero ha reconocido dificultades para avanzar ante la resistencia de las tropas rusas. 

La ciudad de Zaporiyia, cerca del frente sur, que había sido bombardeada el miércoles, sufrió este jueves un nuevo ataque que dejó al menos un muerto y 14 heridos, según las autoridades locales.

"La ciudad sufre bombardeos rusos cotidianos" afirmó el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, que publicó un video que muestra un coche en llamas cerca del hotel Reikatz de esa localidad.

Nadiya, una residente de Zaporiyia, de 71 años, relató a la AFP que se había ido a la cama cuando comenzó el bombardeo del miércoles. 

"Se escuchó un 'bang'. Había humo negro. Vidrios por todo lados. Me puse a gritar", contó.

Ante estas dificultades experimentadas por Kiev, el presidente estadounidense, Joe Biden, pidió el jueves al Congreso más de 13.000 millones de dólares suplementarios de ayuda militar a Ucrania, según un correo de la directora de la Oficina de Administración y Presupuesto (OMB), Shalanda Young.

Además, la administración Biden solicitó una ayuda financiera adicional de 8.500 millones de dólares para asistir económica, humanitariamente y en cuestiones de seguridad a Ucrania y otros países afectados por el conflicto.

Ataques en territorio ruso

Coincidiendo con el lanzamiento de su contraofensiva en junio, Ucrania intensificó en las últimas semanas los ataques con drones aéreos o navales contra los territorios controlados por las tropas rusas, especialmente contra Moscú, las regiones fronterizas y la península de Crimea, anexada por el Kremlin en 2014.

En la región rusa de Briansk, cerca de la frontera con Ucrania, dos personas murieron y dos resultaron heridas en un bombardeo que las autoridades atribuyeron a las fuerzas ucranianas.

En la víspera, otro civil ruso murió por un ataque en la región también fronteriza de Bélgorod.

Además, Rusia anunció el jueves que derribó 11 drones ucranianos cerca de Crimea y otros dos que se dirigían hacia Moscú, aunque no informó de daños ni víctimas por estas acciones.