Rusia reivindica avances en su nueva ofensiva en Ucrania, que evacua a cerca de 2.000 personas
Ucrania - Rusia
Kiev, Ucrania/Centenares de personas fueron evacuadas de la región de Járkov, cerca de la frontera rusa, al día siguiente de que Moscú lanzara sorpresivamente una nueva ofensiva terrestre en esta zona de Ucrania que le permitió de momento tomar varias localidades.
"Han sido evacuadas 1.775 personas", escribió en redes sociales el gobernador regional Oleg Sinegubov. Según él, Rusia atacó con artillería y morteros unas 30 localidades de la zona en las últimas 24 horas. El ministerio de Defensa ruso aseveró que en esta nueva ofensiva sus tropas tomaron cinco localidades ucranianas en la región de Járkov (Borisivka, Ogirtseve, Pletenivka, Pylna y Strilecha), cerca de la frontera rusa, y una sexta localidad más al sur, Keramik, en la región de Donetsk.
Varios grupos de vecinos fueron vistos en camionetas y coches con tantas maletas como podían, en un punto de llegada para evacuados fuera de la ciudad de Járkov. Los evacuados, muchos de ellos personas mayores, se registraron y recibieron comida y asistencia médica en tiendas de campaña.
Las fuerzas del Kremlin lograron pequeños avances en esta zona ucraniana fronteriza, que ya invadieron en 2022 y de la que luego fueron expulsadas ese mismo año. Se trata de los últimos avances rusos frente a unas tropas ucranianas superadas en hombres y potencia de fuego.
Recuperar "la iniciativa"
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, dijo el viernes que la nueva ofensiva terrestre rusa en la región de Járkov había desatado una "batalla feroz". "Tenemos que desbaratar las operaciones ofensivas rusas y que Ucrania recupere la iniciativa", escribió Zelenski este sábado. La región de Járkov ha estado esencialmente bajo control ucraniano desde septiembre de 2022.
Una fuente militar ucraniana dijo también el viernes que las fuerzas rusas habían avanzado un kilómetro y que estaban tratando de crear "una zona de seguridad" en la región de Járkov y en la de Sumi, al lado de esta, para prevenir ataques contra territorio ruso limítrofe con Ucrania. En los últimos meses, las fuerzas ucranianas multiplicaron precisamente los ataques contra infraestructuras energéticas en territorio ruso y en zonas del país ocupadas por Moscú. Una de las regiones rusas más atacadas ha sido la de Bélgorod, fronteriza con la de Járkov.
Este sábado, las autoridades de la región de Lugansk, ocupada por Moscú en el este de Ucrania, dieron cuenta de cuatro muertos en un ataque ucraniano a un depósito de petróleo con misiles de fabricación norteamericana, en la localidad de Rovenki. El gobernador Leonid Pasechnik dijo que este ataque "incendió el depósito de carburante y dañó las casas de alrededor".
En Rusia, dos personas murieron víctimas de ataques ucranianos en las regiones de Bélgorod y Kursk. Por su lado, las autoridades ucranianas reportaron otros seis civiles muertos en bombardeos rusos contra las regiones de Donetsk, Járkov y Jersón en las últimas 24 horas.
Avances "tácticos"
El ejército de Kiev dijo haber desplegado más tropas, y el propio Zelenski precisó que sus fuerzas estaban recurriendo a artillería y drones para detener el avance ruso en la región de Járkov. El Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW, por sus siglas en inglés), con sede en Estados Unidos, estimó el viernes que Rusia había logrado avances tácticos "significativos".
El centro de reflexión consideró que el principal objetivo de Moscú es "detraer personal y material ucraniano de otros puntos críticos del frente oriental ucraniano", y no tanto desatar una "ofensiva a gran escala para rodear y tomar Járkov", la segunda mayor ciudad del país.
Washington anunció un nuevo paquete de ayuda militar de 400 millones de dólares para Kiev horas después de comenzar la nueva operación rusa, y dijo confiar en la capacidad del ejército ucraniano de repeler cualquier ofensiva de Moscú.