Rusia intensifica los ataques en vísperas de la decisión de la Unión Europea
Kiev, Ucrania/Rusia intensificó este lunes los ataques contra las regiones de Járkov y Donetsk, en el noreste y el este de Ucrania, a pocos días de que los 27 países de la Unión Europea (UE) discutan la candidatura de Kiev al bloque.
Al inicio de una semana de intensa actividad en torno a la candidatura de Ucrania al bloque europeo, el jefe de la diplomacia de la UE, Josep Borrell, afirmó que Rusia comete un "verdadero crimen de guerra" al bloquear la exportación de cereales y granos ucranianos.
En un momento de crecientes temores por las consecuencias de la invasión en los precios de los alimentos, Alemania organiza este viernes una reunión internacional sobre el tema a la que asistirá el jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Antony Blinken.
La ministra de Relaciones Exteriores de Francia, Catherine Colonna, instó a Rusia a "dejar de jugar con el hambre en el mundo".
Este lunes "comienza una semana realmente histórica" afirmó Zelenski el domingo en su discurso diario.
Los 27 países de la UE que se reúnen el jueves y el viernes para pronunciarse sobre si el país puede recibir la categoría de aspirante, una decisión que debe ser tomada por unanimidad.
"Nuestro ejército resiste"
"Obviamente esperamos que Rusia intensifique sus ataques esta semana", advirtió el presidente ucraniano. "Nuestro ejército resiste", afirmó.
En su reporte matinal, la presidencia de Ucrania informó que hay un aumento de los bombardeos en la región de Járkov y un incremento de los ataques "en toda la línea del frente" en Donetsk, en el este, donde se registró un muerto y siete heridos.
En el Donbás, la localidad Severodonetsk, ha concentrado la ofensiva para hacerse el conjunto de esta cuenca minera del este, controlada parcialmente por los separatistas prorrusos desde 2014.
"Los rusos controlan la mayor parte de los barrios residenciales" de Severodonetsk pero "si se cuenta toda la ciudad, más de un tercio sigue controlada por nuestras fuerzas armadas", informó el jefe de la administración municipal, Oleksandr Striuk.
Serguéi Gaidai, el gobernador de Lugansk, una de las regiones que componen el Donbás, confirmó en la televisión la caída en manos de los rusos de la localidad de Metiolkiné, en la periferia de Severodonetsk.
Un retorno al carbón
En el frente sur, el ejército ucraniano asegura que las fuerzas rusas "son incapaces de avanzar el terreno" y sólo siguen bombardeando.
El ministerio ruso de Defensa informó que golpeó con misiles cruceros una fábrica en Mikolaiv y que destruyó "diez obuses de 155 mm y hasta veinte vehículos blindados suministrados al régimen de Kiev por Occidente en los últimos diez días".
Mikolaiv es una ciudad portuaria e industrial, donde vivían cerca de medio millón de habitantes antes de la guerra. La localidad es blanco de los ataques rusos porque está ubicada en la ruta hacia Odesa, el principal puerto de Ucrania, 130 km al suroeste.
Por su parte Rusia acusó a las fuerzas ucranianas de haber atacado plataformas de perforación de crudo en el mar frente a la península de Crimea.
Frente a la UE, Rusia utiliza como arma sus hidrocarburos y recortó durante la semana pasada el flujo de gas hacia varios países.
En cambio, las importaciones de petróleo ruso hacia China aumentaron en un 55% en mayo, en comparación con el año pasado.
En un intento de reducir la dependencia de Rusia, y para reducir el consumo de gas, Alemania recurrirá a las centrales de carbón.
"Es amargo, pero es indispensable", declaró el ministro de Economía, el ecologista Robert Habeck, pero el gobierno afirmó este lunes que esta medida es "limitada" y que se cumplirá con la promesa de abandonar el carbón antes de 2030.
Austria también anunció el fin de semana la reactivación de una central de carbón cerrada en 2020.
Las sanciones adoptadas contra Moscú implicaron además restricciones en el tránsito a través de Lituania hacia el enclave de Kaliningrado, que la diplomacia rusa calificó "abiertamente hostiles".