El Gobierno británico apelará la decisión contraria al cierre del Parlamento
El Gobierno británico afirmó hoy que está "decepcionado" con la decisión de la justicia escocesa, que este miércoles declaró "ilegal" la suspensión temporal del Parlamento, y anunció que la recurrirá ante el Tribunal Supremo.
Tras conocerse el fallo del Tribunal de Apelación de Escocia, que dictaminó que el cierre parlamentario contraviene la legalidad, un portavoz del Ejecutivo de Boris Johnson anunció que recurrirá la decisión ante el Tribunal Supremo, la máxima instancia judicial británica.
Los tres jueces que componen la corte de apelación de mayor rango de Escocia revocaron así un fallo anterior, emitido el 4 de septiembre, que dictaminó que el cierre sí se ajustaba al ordenamiento.
La decisión anunciada hoy no está previsto que altere, por el momento, los planes de suspensión de la Cámara de los Comunes -que quedó clausurada este martes-, ya que, ante la apelación presentada, el caso se dirimirá el 17 de septiembre en la corte suprema.
Los más de 70 parlamentarios que se querellaron contra el gabinete conservador consideran que su objetivo es silenciar al Parlamento con la estrategia de clausurarlo de cara al "brexit", ya que las cámaras no reabrirán hasta el 14 de octubre, días antes del 31, la fecha prevista para la salida.
El primer ministro mantiene, en cambio, que su intención es dar a conocer su programa de gobierno para el próximo año en lo que se conoce como el "Discurso de la reina" el 14 de octubre.
"El Gobierno del Reino Unido necesita presentar una agenda legislativa nacional sólida. Prorrogar el Parlamento es la forma legal y necesaria de lograrlo", indicó el portavoz.
Entre los firmantes de la demanda, liderada por la diputada del Partido Nacionalista Escocés (SNP) Joanna Cherry, están también la líder de los Liberales Demócratas, Jo Swinson, varios parlamentarios laboristas e independientes y el activista Jo Maugham, de la asociación contraria al "brexit" "The Good Law Project".