Decisión de la OPEP sobre petróleo genera inestabilidad
La decisión de la OPEP de mantener sin cambios su techo de producción, pese al derrumbe de los precios del petróleo, generaba el viernes inestabilidad en los mercados e incertidumbre sobre sus consecuencias, en especial para Venezuela.
Tras una fuerte caída del precio del crudo el jueves por la tarde, tras la decisión de la Organización de Países Exportadores de petróleo (OPEP), el barril trataba de estabilizarse el viernes a media jornada.
A las 10H45 GMT, el Brent valía 72,80 dólares (+22 centavos) pero el WTI cotizaba a USD 69,03, casi cinco menos respecto al cierre del miércoles (el jueves fue festivo en Estados Unidos).
Reunidos el jueves en Viena, los ministros de la OPEP habían decidido mantener su techo de producción en 30 millones de barriles diarios durante los próximos seis meses y renunciaron a reducir la oferta para sostener los precios, que han caído un 35% desde junio.
Ante ese derrumbe de las cotizaciones, algunos países del cártel -entre ellos Venezuela-pidieron en vano una reducción de la producción para volver a hacer subir los precios.
Las petromonarquías del Golfo -con Arabia Saudí y Kuwait a su cabeza-, que tienen grandes reservas en divisas, se negaron a ello. Además, con un objetivo claro: soportar precios bajos el tiempo necesario para competir con el emergente petróleo de esquisto, masivamente producido ahora en Estados Unidos. "Los productores de petróleo de esquisto van a tener que hacer frente cada vez a más problemas con un barril por debajo de los 70 dólares" consideran los analistas de Commerzbank.
Venezuela, la "verdadera víctima"
Tras esta decisión de la OPEP, la "verdadera víctima, hoy, es Venezuela", opina Christopher Dembik, economista de Saxo Bank en París.