Cuerpos de los dos espeleólogos españoles llegan a ciudad marroquí de Uarzazate

Los cuerpos de dos espeleólogos españoles fallecidos tras caer en un barranco en el Atlas marroquí fueron trasladados este martes a Uarzazate (sur), mientras su compañero superviviente iba a ser repatriado a España.

Los restos de Gustavo Virués y José Antonio Martínez, originarios de Andalucía y de 41 años cada uno, fueron escoltados por gendarmes y oficiales marroquíes hasta la morgue del hospital Bugafer de Uarzazate, donde se hallaban presentes varios diplomáticos españoles.

Hospitalizado en la noche del domingo al lunes en Uarzazate, un tercer espeleólogo español, Juan Bolívar, único superviviente del drama, salió el martes de la clínica, según un fotógrafo de AFP.

Se dirigió al aeropuerto para regresar a España en compañía de diplomáticos españoles.

Jalid Salmi, delegado regional del ministerio marroquí de Salud, indicó el lunes a la AFP que este policía de 27 años se hallaba en "buen estado de salud", pese a haber sufrido hipotermia, según la prensa española.

Aún se desconoce cuando se trasladarán a España los cuerpos de los fallecidos.

Los tres españoles habían sido localizados el sábado en un barranco, cerca de la localidad de Tarmest, tras estar tres días desaparecidos, y las autoridades marroquíes habían lanzado una operación de rescate.

Pese a los medios aéreos y terrestres desplegados, fueron necesarios varios días para recuperar a los espeleólogos, debido, sobre todo, a las dificultades de acceso al lugar, en plena zona montañosa, y a condiciones meteorológicas desfavorables.

Allegados de los dos fallecidos, así como el presidente de la Federación Andaluza de Alpinismo, de la que eran miembros, criticaron el desarrollo de las operaciones de rescate, mientras que el jefe de gobierno español, Mariano Rajoy, agradeció a Marruecos "su gran esfuerzo".

La televisión pública española TVE aseguró, citando a los equipos de rescate marroquíes, que uno de los tres espeleólogos pudo haber resbalado sobre una placa de hielo, arrastrando a los otros dos al barranco.

El escarpado macizo del Alto Atlas, con cumbres de casi 4.000 metros, es famoso entre los senderistas y Marruecos es una de los primeros destinos de los españoles, especialmente durante el período de vacaciones de Pascua.