China y la Unión Europea se enfrentan
China y la Unión Europea (UE) se enfrentaron el miércoles por la situación de tres ciudadanos comunitarios, uno de ellos detenido en Pekín desde comienzos de año y otros dos bajo custodia china tras desaparecer en Hong Kong a finales de 2015.
Se trata de los suecos Peter Dahlin y Gui Minhai y del británico Lee Bo (estos dos últimos de origen hongkonés).
Un portavoz de Exteriores chino, Hong Lei, aseguró hoy en una rueda de prensa en Pekín que China "garantiza los derechos legítimos e intereses" de estos ciudadanos, poco después de que el embajador de la UE en Pekín, Hans Dietmar Schweisgut, pidiera "transparencia total y acceso completo" a éstos por parte de diplomáticos de sus países.
Dahlin, detenido a principios de enero, es cofundador de la ONG China Action, dedicada a promover los derechos humanos y a la que las autoridades acusan de poner en peligro la seguridad del Estado.
Gui y Lee, por su parte, son dos de los cinco editores y libreros de Hong Kong que desaparecieron de forma misteriosa en octubre y diciembre pasados y que recientemente comunicaron a sus familias que están en China.
El portavoz chino aseguró que Dahlin "está involucrado en actividades criminales", después de que las fuerzas de seguridad chinas le acusaran de recibir dinero no declarado y de actividades irregulares junto a una firma de abogados perseguida por Pekín.
"El caso está muy claro: él ha reconocido sus crímenes y ha pedido disculpas al Gobierno y a la población china", indicó Hong en referencia a la supuesta confesión del sueco el día anterior en la televisión estatal china CCTV, en la que Dahlin admitió haber "violado la ley china con mis actividades aquí" y pidió disculpas.
Para la ONG, la confesión, que podría ser un atenuante ante una eventual condena de Dahlin, es "falsa" y "absurda".
El embajador de la UE expresó hoy, en una rueda de prensa anterior a la del representante de Exteriores chino, su "profunda preocupación" y pidió acceso de los diplomáticos a sus ciudadanos, tras manifestar el "apoyo" total de la UE a las autoridades de Suecia y el Reino Unido en sus contactos con Pekín.
Poco después, Hong insistió en que Pekín ha garantizado el derecho de Dahlin a reunirse con miembros de la Embajada de Suecia en Pekín y que le ha suministrado las medicinas que necesita por padecer la enfermedad de Addison.
"Después de ser puesto bajo disposición policial, las autoridades han enviado equipos médicos para hacerle una revisión y darle las medicinas necesarias", señaló el portavoz oficial chino.
En cuanto a Gui Minhai, de la librería Causeway Bay Books y la editorial Mighty Current, especializada en la edición y venta de libros críticos con el régimen chino, y a su compañero Lee Bo, Hong afirmó "no disponer de información" y dijo que los medios chinos ya habían comentado la situación de ambos.
Como Dahlin, Gui apareció el pasado día 17 en la televisión CCTV y aseguró que se entregó a las autoridades para rendir cuentas por el atropello y muerte de una joven en 2004, por lo que supuestamente huyó del país.
Familiares y amigos cercanos de Gui, que tiene la doble nacionalidad china y sueca, así como organizaciones y publicaciones a través de internet, mostraron su escepticismo sobre la grabación.
De Lee Bo sólo se sabe que las autoridades chinas confirmaron a las de Hong Kong que el librero, que desapareció a finales de diciembre en la excolonia británica, se encuentra en China, según dijo la policía hongkonesa en un comunicado.
Las autoridades chinas no han formulado de momento ningún cargo específico en su contra.
Schweisgut consideró hoy que, además de la cuestión de los derechos humanos, en estos dos últimos casos se plantea "el respeto" al concepto de "un país, dos sistemas" acuñado por China para Hong Kong, donde hay más libertades que en la parte continental, y donde no pueden actuar las fuerzas de seguridad chinas.
En respuesta, Hong defendió el derecho de Pekín a decidir en "los asuntos internos de Hong Kong y pidió que "no haya interferencias desde fuera" en estos casos.