Guatemala, esplendoroso pasado maya y presente de pobreza y corrupción
Guatemala, considerada la cuna de la civilización maya, elige este domingo a su próximo presidente en un balotaje, en medio de altos niveles de pobreza, violencia y corrupción.
Asombrosos mayas
El país tiene más de 108.000 kilómetros cuadrados, buena parte de exuberante vegetación, y su nombre en náhuatl significa "lugar de muchos árboles".
Cuenta con 37 volcanes, de los que el Pacaya, el Santiaguito y el Fuego permanecen activos.
Los mayas fueron una de las mayores civilizaciones prehispánicas de América, con ciudades que florecieron unos 2.000 años A.C.
Crearon un famoso calendario, que todavía asombra a arqueólogos y astrónomos.
Uno de los principales sitios mayas es Tikal, en la norteña selva de Petén. Con imponentes pirámides y templos, es patrimonio mundial de la Unesco desde 1979.
En contraste, los descendientes de los mayas ahora viven en Guatemala en rústicas aldeas con calles de tierra enclavadas en las montañas, con vetustas casas de barro, sin agua potable ni electricidad. La pobreza en esas áreas bordea el 80%.
En Guatemala se hablan 22 idiomas mayas, además del xinca, el garífuna (de los negros del Caribe) y el español (oficial). Los indígenas representan el 42% de la población.
La herencia colonial española y la tradición ancestral maya se mezclan en las coloridas procesiones de Semana Santa, patrimonio de la Unesco desde 2022.
Otros atractivos turísticos son el lago de Atitlán y la ciudad colonial de Antigua.
En 2022, 1,8 millones de turistas visitaron Guatemala, por debajo del récord de 2,5 millones en 2019, antes de la pandemia.
Pobreza y emigración
Es la nación más poblada de América Central y con fama de poseer el mejor clima. Es llamado "el país de la eterna primavera".
Tiene la mayor economía de la región, pero 10,3 millones de sus 17,6 millones de habitantes viven en la pobreza, según cifras oficiales.
Además, uno de cada dos niños menores de cinco años sufre desnutrición crónica, de acuerdo a Unicef, y el analfabetismo alcanza al 18,5%, según el Censo de 2018.
El salario mínimo urbano es de 427 dólares al mes, pero el 71% de los guatemaltecos se gana la vida en la informalidad.
La tasa de homicidios es de 17,3 por cada 100.000 habitantes, según la ONU, casi el triple que el promedio mundial.
La pobreza y la violencia inducen a miles a emigrar cada mes. La cancillería estima que 2,8 millones de guatemaltecos viven en Estados Unidos, solo medio millón en forma legal.
En 2022 Estados Unidos deportó 40.713 guatemaltecos, más del doble que en 2021.
Los expatriados enviaron 18.040 millones de dólares en remesas en 2022, que equivalen al 19% del PIB nacional, por sobre las exportaciones (15.655 millones de dólares).
Las importaciones sumaron 32.123 millones de dólares en 2022, por lo que registra un gran déficit comercial. Su principal socio económico es Estados Unidos.
Corrupción
El país ha tenido nueve presidentes desde el regreso a la democracia en 1985, dos de ellos condenados por corrupción.
Alfonso Portillo (2000-2004) cumplió condena en Estados Unidos y Guatemala por lavado de dinero, mientras que Otto Pérez (2012-2015) renunció acusado de dirigir fraudes de aduanas y purga una condena de 16 años de cárcel.
Sin embargo, en 2019 la lucha contra la corrupción sufrió un retroceso con el fin de la CICIG, un ente avalado por la ONU que investigó sonados escándalos desde 2007.
La actual fiscal general, Consuelo Porras, fue incluida por Estados Unidos en 2021 en una lista de actores "corruptos", junto con otros fiscales y jueces en ejercicio.
"En Guatemala se desestabiliza la democracia desde instituciones carcomidas por la corrupción. El hastío de la población se expresó en la primera vuelta electoral con una mayoría de votos nulos [17,4%]", dice a la AFP el rector de la Universidad para la Paz de Costa Rica, Francisco Rojas.
"Eterna tiranía"
Guatemala fue parte del imperio español desde 1524 hasta su independencia en 1821.
Tras una serie de dictaduras en el siglo XX, el país vivió una década de "primavera democrática" a partir de 1944 bajo los gobiernos de Juan José Arévalo y Jacobo Árbenz.
El candidato Bernardo Arévalo, hijo de Juan José, ahora promete relanzar la "primavera", que terminó en 1954 con el derrocamiento de Árbenz orquestado por Estados Unidos tras un intento de reforma agraria que atentaba contra los intereses de la poderosa United Fruit Company.
El escritor guatemalteco Luis Cardoza y Aragón (1904-1992), exiliado en México tras la caída de Árbenz, lo resumió: "Diez años de primavera en el país de la eterna tiranía".
En 1960 comenzó una guerra civil que dejó 200.000 muertos y desaparecidos, según una Comisión de la Verdad de la ONU. La paz se firmó en 1996.
Su informe atribuyó a las fuerzas de seguridad la mayoría de los crímenes, muchos en aldeas indígenas, pero también a la guerrilla izquierdista.
En 1992, la activista indígena Rigoberta Menchú ganó el Premio Nobel de la Paz. En 1967, el escritor Miguel Ángel Asturias (1899-1974) había obtenido el Nobel de Literatura.