El expresidente salvadoreño Saca confiesa cohecho para obtener una pena leve
El expresidente de El Salvador Elías Antonio Saca (2004-2009) confesó este viernes el delito de cohecho en un juicio "abreviado" para obtener una pena de dos años de prisión.
El abogado de Saca, Mario Machado, dijo a la prensa que el exmandatario confesó que mantuvo una conversación con un letrado que le ofreció obtener información o influir, mediante una empleada judicial, sobre la causa penal que enfrenta por supuesto enriquecimiento ilícito.
"Ya hubo una confesión de parte del señor Saca en cuanto a los hechos relacionados en el cuadro fáctico" de la acusación, señaló Machado.
Apuntó que el Juzgado Noveno de Instrucción de San Salvador suspendió el juicio por al menos dos horas y media por fallas técnicas en la reproducción de las grabaciones telefónicas intervenidas por el Ministerio Público en las que Saca comete el cohecho.
Un portavoz del órgano Judicial confirmó a Efe que el referido juzgado comenzó el juicio pasadas las 9.00 hora local (15.00 GMT), y al que la prensa no tuvo acceso.
De acuerdo con una de las fiscales del caso, Saca ofreció 10.000 dólares para obtener la información relacionada con la causa civil.
La Fiscalía General de la República pactó con Saca su confesión a cambio de la referida pena, misma que cumplió durante la detención provisional, según Machado.
Este mismo beneficio judicial utilizó Saca para evitar una pena de hasta 30 años de prisión en un juicio por la malversación y lavado de más de 300 millones de dólares del presupuesto estatal.
Saca confesó en agosto de 2018 los delitos de peculado y lavado de dinero y recibió una pena de 10 años.
Machado aseguró a periodistas antes de la instalación del juicio que Saca aceptó confesar el delito "por conveniencia" y para "evitar que un proceso jurídico tenga una consecuencia judicial".
"Por este caso, el señor Saca tiene más de dos años de estar en prisión provisional y si la pena es de 2 años, entendería que debería estar cumplida", acotó el letrado.
Saca llegó al poder bajo la bandera de la derechista Alianza Republicana Nacionalista (Arena) y en 2014 fue candidato presidencial con la Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA), actual partido oficial.
Una diputada de Arena, partido que expulsó a Saca, propuso al Congreso el pasado 15 de mayo bloquear este recurso legal en delitos relacionados con la corrupción.
La propuesta de reforma legal fue presentada por la diputada Marcela Villatoro, quien señaló en un escrito a la Junta Directiva del Congreso que el uso de los procesos "abreviados" por funcionarios ligados a la corrupción ha generado en la población "indignación y pérdida de confianza".
La esposa de Saca, Ana Ligia de Saca, también buscó someterse a un "juicio abreviado" para confesar el delito de lavado de dinero a cambio de una pena excarcelable en un proceso ligado a la trama de corrupción del expresidente.
No obstante, el pacto no prosperó por las diferencias entre ambas partes sobre la responsabilidad civil, dado que la Fiscalía pedía que entregará más de 17 millones de dólares y la defensa aseguró que la procesada no posee el dinero suficiente para el pago.