Se acelera la retirada de tropas estadounidenses de Afganistán
Kabul/La retirada militar estadounidense de Afganistán se encuentra muy adelantada, dijo este miércoles un alto funcionario norteamericano entrevistado por la AFP, después de que el presidente Donald Trump volviera a reclamar que estas tropas vuelvan a Estados Unidos.
Afganistán vivió este miércoles una jornada bastante tranquila, con solamente un incidente importante, al día siguiente de finalizar el alto el fuego de tres días decretado por los talibanes, que todavía no han anunciado si lo prolongarán.
"La retirada ha sido acelerada por las precauciones tomadas por la covid-19", declaró a la AFP un alto funcionario del departamento de Defensa estadounidense.
Estados Unidos se había comprometido a reducir sus efectivos militares de 12.000 a 8.600 para mediados de julio, según el acuerdo firmado con los talibanes el 29 de febrero en Doha.
En virtud de este texto, todas las tropas extranjeras deberán haber abandonado Afganistán para la primavera (boreal) de 2021, a cambio de garantías de seguridad por parte de los insurgentes.
Pero actualmente solo quedan 7.500 soldados del país, señaló el alto funcionario estadounidense.
Donald Trump declaró el martes ante periodistas que "unos 7.000 soldados estadounidenses" continúan desplegados "en este momento" en Afganistán, país en el cual Estados Unidos ha estado presente desde hace más de 18 años, en la guerra más larga de su historia.
Este miércoles, Trump, que no cesa de repetir que quiere repatriar a todas las tropas estadounidenses desplegadas en Afganistán lo antes posible, señaló que su ejército no debería actuar en ese país como una "fuerza policial".
"Después de 19 años, es hora de que [ellos] hagan de policía en su propio país", tuiteó Trump.
"¡Traigan a nuestros soldados a casa, pero observen bien qué está ocurriendo y si es necesario ataquen como un rayo, como nunca anteriormente!", añadió, probablemente dirigiéndose al Pentágono.
El portavoz del Pentágono, el teniente coronel Thomas Campbell, declaró en un comunicado que Estados Unidos respeta el acuerdo con los talibanes. Cualquier otra nueva retirada se hará "después de que el gobierno estadounidense evalúe el ambiente de seguridad y el respeto de los talibanes al acuerdo de Doha", añadió.
"Buen progreso"
Tras casi cuatro días de respiro, el ejército afgano lanzó operaciones aéreas y terrestres contra talibanes que atacaron a un convoy logístico en la provincia de Zabul (sur), señaló el portavoz de la policía provincial, Lal Mohamad Amiri.
Unos 18 insurgentes fueron abatidos y tres niños resultaron heridos, añadió.
A pesar de que las autoridades afganas liberaron el martes a 900 prisioneros talibanes, después de haberlo hecho con otros 100 el día anterior, con la esperanza de que este gesto llevara a una prolongación del cese el fuego, los insurgentes aún no han dado a conocer su posición oficial al respecto.
"La liberación de 900 prisioneros por parte del otro bando es un buen progreso", comentó el martes de noche Suhail Shaheen, portavoz de los talibanes, añadiendo que ellos también liberarán "pronto un número significativo de prisioneros".
Los rebeldes dieron la sorpresa el sábado al decretar unilateralmente detener los combates para que sus conciudadanos "pudieran celebrar en paz y tranquilidad" el Aíd el Fitr, que marca el final del Ramadán, mes de ayuno sagrado musulmán.
El presidente afgano, Ashraf Ghani, aceptó inmediatamente esta oferta, y el domingo decidió liberar "hasta 2.000 prisioneros talibanes en gesto de buena voluntad", según su portavoz, Sediq Sediqqi.
Estas liberaciones de prisioneros --hasta 5.000 talibanes contra 1.000 miembros de las fuerzas afganas-- están previstas por el acuerdo de Doha, que no ha sido ratificado por Kabul.
El intercambio de detenidos se ha retrasado. Antes del alto el fuego, Kabul había liberado a unos mil prisioneros, en tanto los insurgentes unos 300.
El alto el fuego, el primero por iniciativa de los talibanes desde que una coalición internacional liderada por Estados Unidos los expulsara del poder en 2001, ha sido respetado, a pesar de algunas escaramuzas.
Se trata de la segunda interrupción de los combates en Afganistán desde 2001. La primera, por iniciativa del presidente Ghani, había durado tres días en junio de 2018, también con el motivo del Aíd el Fitr.
Los talibanes también observaron una tregua parcial de nueve días, entre el 22 de febrero y el 2 de marzo de 2020, en ocasión de la firma del acuerdo de Doha.