Arabia Saudita ejecuta a seis iraníes por droga y alcanza récord de ejecuciones en 2024
En 2024, Riad ejecutó a 117 personas por tráfico de drogas, de los cuales 85 eran extranjeros.
Arabia Saudita ejecutó a seis iraníes condenados a muerte por tráfico de drogas, después de un año marcado por un récord de 338 ejecuciones por distintos delitos, según un balance de la AFP basado en cifras oficiales.
Los iraníes fueron ejecutados en Dammam, en la costa del golfo Pérsico, por haber "introducido clandestinamente hachís" en Arabia Saudita, informó el miércoles el Ministerio del Interior en un comunicado publicado por la agencia oficial de prensa saudita (SPA), que no precisó la fecha de las ejecuciones. En respuesta, Teherán convocó al embajador saudita para transmitirle su "enérgica protesta" por estas ejecuciones, que calificó de "inaceptables" y "violatorias de las normas del derecho internacional", según la diplomacia iraní.
En 2024, Riad ejecutó a 117 personas por tráfico de drogas, de los cuales 85 eran extranjeros, según el recuento de AFP. En 2023, las autoridades sauditas lanzaron una campaña antidrogas muy publicitada que incluyó una serie de redadas y detenciones. Esta nación monárquica y conservadora del Golfo es un mercado importante del captagon, una droga de la familia de las anfetaminas que se produce en Siria y Líbano, según la ONU.
Las ejecuciones por narcotráfico han aumentado desde que hace dos años terminó una moratoria para la aplicación de la pena de muerte por cargos de drogas. De hecho, en 2024 este país llevó a cabo 338 ejecuciones, en comparación con las 170 de 2023, según el balance. En 2023, Arabia Saudita se convirtió en el tercer país con mayor número de ejecuciones de prisioneros del mundo, por detrás de China e Irán, según Amnistía Internacional.
Arabia Saudita rompió relaciones con Irán en 2016 después de que su embajada en Teherán y su consulado en Mashhad fueran atacados por manifestantes enfurecidos por la ejecución del clérigo chiita Nimr al Nimr. Sin embargo, las relaciones diplomáticas se restablecieron en marzo de 2023, gracias a la mediación de China.
La aplicación de la pena de muerte por parte de Riad es criticada regularmente por grupos de derechos humanos. Las autoridades sauditas afirman que las ejecuciones son necesarias para mantener el orden público y que sólo se aplica como último recurso.