Suben a 16 los muertos, incluidos 7 niños, en el sur de Yemen, según los hutíes
Los rebeldes hutíes elevaron a 16, entre ellos 7 menores, el número de muertos en dos supuestos ataques de la coalición árabe liderada por Arabia Saudí que impactaron en una casa en el sur del Yemen.
El portavoz de las Fuerzas Armadas hutíes, Yahya Sarea, aseguró en un escueto comunicado que "el recuento final del bombardeo de las fuerzas de la agresión contra la casa del ciudadano Abbas al Halimi en Qaataba, en la provincia de Dhalea, es de 16 muertos, entre ellos 7 menores y 4 mujeres".
Y añadió que otros 5 hombres perecieron, mientras que un enfermero que acudía en una ambulancia al lugar del suceso resultó herido por la segunda incursión.
Anteriormente, el canal Al Masira, afín a los hutíes, indicó que todos eran miembros de una misma familia.
La coalición árabe no ha reaccionado hasta el momento ante esta información.
Combatientes hutíes, respaldados por Irán, y las fuerzas leales al Gobierno del presidente Abdo Rabu Mansur Hadi, apoyado por la coalición y actualmente exiliado en Riad, mantienen combates en Qaataba.
Estos ataques se producen un día después de que la alianza lanzara en el noroeste otros ataques aéreos en los que murieron siete personas, según el portavoz del Ministerio de Sanidad de los rebeldes hutíes, Yusuf al Haderi, aunque la coalición tampoco ha confirmado esta acción.
Hace cuatro días el movimiento hutí anunció que no lanzaría más misiles y drones contra territorio saudí como un gesto de paz, urgiendo a Riad a hacer lo mismo.
Los rebeldes hutíes anunciaron este alto el fuego pero advirtieron que responderán a cualquier ataque liderado por los saudíes.
El Gobierno de Arabia Saudí reaccionó pocas horas después con frialdad a este anuncio y afirmó que esperará acontecimientos.
El anuncio de los hutíes se produjo en medio de un incremento de la tensión en la región tras el ataque con drones y misiles el pasado día 14 contra dos plantas de la petrolera estatal saudí Aramco.
La guerra del Yemen estalló a finales de 2014 cuando los hutíes tomaron Saná y expulsaron al presidente Hadi, reconocido internacionalmente.
El conflicto tomó una nueva dimensión a principios de 2015 por la implicación de Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos al frente de la coalición árabe que respalda al Gobierno de Hadi, lo que recrudeció el conflicto llevándolo a ser el escenario de la peor crisis humanitaria en el mundo, según la ONU.