Sin acuerdo diálogo gobierno-indígenas
Delegaciones del gobierno colombiano e indígenas uwa se levantaron de una mesa de diálogos este viernes que buscó infructuosamente llegar a un acuerdo entre las dos partes para permitir la reparación de un oleoducto, detenido desde hace un mes.
La reunión de siete horas en la localidad de Cubará, en el departamento de Boyacá y a unos 355 kilómetros al noreste de Bogotá, culminó sin acuerdos porque ninguna de las dos partes consideró viables propuestas de la otra.
Los uwa, unos 8.300 indígenas que habitan en un resguardo de 20.275 hectáreas que abarca porciones de los departamentos de Boyacá, Santander y Norte de Santander, exigen al gobierno la entrega de todos sus territorios ancestrales, la cancelación de proyectos petroleros en esas regiones y un resarcimiento de unos 2 billones de pesos (unos 1.033 millones de dólares) por el impacto ambiental, social y cultural a su etnia, entre otras demandas, según un documento de cinco páginas con sus quejas y demandas.
El gobierno estuvo representado en la reunión por el ministro de Minas y Energía, Amylkar Acosta, el ministro del Interior, Aurelio Iragorri, el presidente de la estatal petrolera Ecopetrol, Javier Gutiérrez, entre otros.
"Fracasó el intento de diálogo. Los señores (uwa) no aceptaron nada, ahora vamos a mirar y estamos en un avión de regreso a Bogotá", dijo el ministro Acosta en diálogo telefónico.
Lo que "reconoce el Estado son los resguardos otra cosa muy distinta (es) si hay que reconsiderar o ampliar esos resguardos y eso es un proceso y se les planteó... El gobierno está dispuesto a iniciar ese proceso de volver a considerar los límites que ustedes (comunidad uwa) plantean coloniales o ancestrales", dijo Acosta, al asegurar que la respuesta de los voceros indígenas fue que esas han sido viejas promesas de distintos gobiernos.
"No tenemos previsto para nada otra reunión por el momento con ellos", dijo.
Agregó que lo preocupante para el gobierno es que no pueden reparar y bombear crudo por el oleoducto Caño Limón-Coveñas, en un tramo ubicado en lo que los uwa sostienen es su territorio, y de allí que las exportaciones de crudo estén limitadas, aunque están sacando petróleo en camiones.
Dijo carecer de inmediato de las cifras sobre cuánto crudo se ha quedado varado y eventuales ingresos dejados de percibir.
El oleoducto se extiende 780 kilómetros y tiene una capacidad de unos 200.000 barriles de crudo cada día desde campos petroleros llamados Caño Limón, al noreste del país y en la frontera con Venezuela, hasta el puerto de Coveñas, sobre la costa del Caribe, en el norte del país.
La tubería sufrió un atentado el 25 de marzo y desde entonces la comunidad uwa se opone a permitir el ingreso de a cuadrillas de reparación hasta tanto el gobierno atienda sus demandas. Según Acosta, se han dejado de bombear unos 72.000 barriles de crudo al día y la capacidad de unos 800.000 barriles de almacenamiento en tanques en los campos petroleros esta ya casi colmada.
La estadounidense Occidental es la que extrae el crudo del campo Caño Limón, que alimenta la tubería y que es frecuente objeto de atentados por parte de guerrillas como las Fuerzas Armadas revolucionarias de Colombia (FARC) y el Ejército de Liberación nacional (ELN) porque dicen oponerse a la extracción de la riqueza petrolera del país por parte de empresas foráneas.
Acosta ha dicho que en el primer trimestre del año se han producido al menos 27 ataques contra oleoductos del país, la mayoría contra el Caño Limón, comparados con los 47 atentados en el mismo período del 2013.