Peregrinos reciben con júbilo imagen de la Virgen de Fátima en Panamá
Miles de peregrinos recibieron este lunes la imagen original de la Virgen de Fátima, trasladada desde Portugal, en el marco de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), organizado por la Iglesia católica.
La estatua religiosa llegó acompañada de una comitiva de científicos del Museo del Santuario de Fátima y una universidad en Portugal a las 20.30 hora local (01.30 GMT del martes), en el Aeropuerto Internacional de Tocumen, el principal de Panamá.
Estos acompañan a la imagen de Nuestra Señora de Fátima para evaluar su estado físico y de conservación, antes y durante su viaje a la JMJ en Panamá, que empieza desde mañana.
Desde la terminal aérea se trasladó al símbolo católico en caravana a la Iglesia Nuestra Señora de Lourdes, ubicada en el barrio de Carrasquilla, donde se celebrará una misa de entronización y bienvenida, explicó a Efe el padre Alejandro Goulbourne.
Detalló que los peregrinos y devotos participarán de una vigilia en inmediaciones de la iglesia, luego el día martes se efectuará el rosario de la Aurora, que contará con rezos y confesiones.
Luego de la eucaristía a las 07.00 hora local (12.00 GMT) habrá una procesión desde la Iglesia de Lourdes hasta el Parque del Perdón, en los terrenos del parque Omar Torrijos en ciudad de Panamá.
Entre tanto, el sábado 26 será trasladada a un recinto especial, ubicado en la sede de actos centrales, donde se realizará la vigilia de la JMJ, y se emulará la Procesión de las Velas como se realiza en la explanada del Santuario de Fátima. El 27 estará la presencia de la imagen en la misa de clausura.
El religioso mencionó que el recibimiento de la imagen es un hecho especial, porque solo en casos excepcionales sale del Santuario de Nuestra Señora del Rosario de Fátima, localizado en Cova de Iria.
El año pasado, una de las 13 replicas oficiales de la imagen peregrina de Fátima visitó el país centroamericano.
El culto a Fátima tiene su origen entre el 13 de mayo y el 13 de octubre de 1917, período durante el que tres niños portugueses -Lucía, Jacinta y Francisco- aseguraron que habían sido testigos de varias apariciones de la Virgen.
Los tres menores, que eran pastores, explicaron que la Virgen les hizo varias revelaciones en esos encuentros, que conforman la profecía de Fátima, dividida en tres partes.
El papa San Juan Pablo II era muy devoto de la Virgen de Fátima y quiso que la bala, con la que fue herido en un atentado el 13 de mayo de 1981, fuera incrustada en la corona que cubre la cabeza de la estatua como reconocimiento a que ella evitó su muerte milagrosamente.