Luego de estar en Panamá por espacio de 5 días en la Jornada Mundial de la Juventud, el papa Francisco se despidió de nuestro país y volvió a Ciudad del Vaticano.
Decía San Agustín: “Las palabras impresas aquí son conceptos. Debes pasar por las experiencias”. Una frase que se hizo realidad en miles de jóvenes que participaron de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) y a quienes el papa Francisco invitó a “armar lío con los abuelos”, antes de partir a la ciudad de El Vaticano, la tarde de este 27 de enero.
Antes de finalizar la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) Panamá 2019, el papa Francisco ha querido reunirse con los voluntarios que trabajaron para convertir en realidad este “sueño común”.
Andrés Guevara tiene 24 años, es un diseñador gráfico salvadoreño. Vino a Panamá hace un año a cumplir un sueño: cantar para el Papa Francisco y el mundo. Lo cumplió.
Fue la casa hogar “Buen Samaritano”, el escenario donde el papa Francisco, pronunció un discurso de misericordia y agradeció a los laicos y consagrados por la labor que hacen por los más necesitados.
La vibrante Lisboa acogerá a miles de personas de todo el mundo en la próxima Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), en 2022. Los encargados de organizar el evento compartieron este domingo sus expectativas con la prensa, de ser ese año punto de encuentro.
Son pocos los lugares, donde la misericordia de la que habla el papa Francisco se hace realidad. Y este domingo 27 de enero, el máximo jefe de la Iglesia católica en medio de su apretada agenda, visitó la casa hogar “El Buen Samaritano” para presenciar con sus ojos, el trabajo que se realiza en este lugar.
La Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) fue el escenario propicio para que el Papá Francisco ante jóvenes de todo el mundo les hiciera una invitación a tomar las riendas de sus vidas desde el presente para lograr una verdadera transformación.