La clase política tiene que empezar a tomar decisiones y ser responsable
El Banco de Pensamientos ante el Coronavirus es un especial digital que recoge las opiniones de diferentes personalidades y profesionales panameños en relación a cómo ven Panamá después de la pandemia. Sus ideas pueden servirte de inspiración para enfrentar la crisis.
Panamá/Después de la pandemia vamos a tener muchos resultados que deben servir para volver a empezar, se estima que el desempleo, que ya afectó a 85 mil panameños, podrá aun incrementarse más. Habrán algunos sectores que pasando por mucho sacrifico podrán ponerse en marcha más rápido y otros que por su característica van a demorar en recuperar el ritmo que antes tenían, es una realidad que tenemos que enfrentar como país.
No llegamos donde estamos como país sin tener que reponernos de los momentos difíciles, nuestras acciones en términos generales durante la pandemia son un reflejo de lo que podemos esperar y lo que podemos ver como país a futuro. La solidaridad ha vencido al individualismo, el desprendimiento y la reciprocidad por parte de la mayoría de los panameños ha revelado nuestro tejido social y de lo que somos capaces de hacer por nuestras familias, amigos y comunidad.
Por otro lado la pandemia también reveló algunas inconsistencias que tenemos que atender y donde no hay margen a la postergación, temas como el de la Caja del Seguro Social, el fortalecimiento del sistema de salud, la modernización de la educación, del estado, de nuestro sector agropecuario, no pueden seguir funcionando como rehenes de grupos, directivas y élites que controlan a estos sectores en detrimento de las mayorías y buscando el beneficio de pocos.
Debemos salir con una clara lección, la educación en Panamá se detuvo para el 90% de los estudiantes, eso es una realidad que habla de lo mucho que nos hace falta para que nuestra educación esté a la vanguardia, en los países donde hay un camino firme al desarrollo y calidad de vida, en estos países la educación se pudo adaptar y no se detuvo, eso nos pone en desventaja, tenemos que avanzar a una educación moderna y de calidad donde el conocimiento no se detenga, mucho en materia educativa tiene que replantearse. Los recursos están.
En materia de seguridad social hemos visto la crisis en la que se encuentra el programa de Riesgo de Invalidez Vejez y Muerte de la CSS, tampoco hemos llegado a ese punto crítico de forma espontánea, han sido décadas de malos manejos.
No podemos seguir viviendo, pensando que una segunda pandemia que paralice al mundo no va a volver a ocurrir. Por eso el fortalecimiento y modernización de nuestro sector agropecuario tiene que ser una de las grandes tareas a las que, reitero estamos convocados sí o sí.
Este es el país que veo posterior a la pandemia, un país donde la clase política tiene que empezar a tomar decisiones y ser responsables, el COVID19 ha hecho que la agenda de país se reorientar hacia lo verdaderamente importante.
Cómo debemos reinventarnos
Con el daño colateral que va a terminar produciendo la pandemia y teniendo la experiencia positiva de solidaridad que ha demostrado el pueblo panameño, creo que el camino a futuro debe ser el de fortalecer el tejido social; la comunidad, las instituciones educativas, culturales, religiosas y de forma especial, la familia.
El objetivo será lo que supedite las herramientas que utilizaremos, acceso a la tecnología, digitalización, trasladar al sector turismo y agropecuario toda nuestra buena experiencia logística que hemos desarrollado en el Canal Panamá.
Todo esto tiene que hacerse, es parte de la reinvención, pero supeditado a un objetivo, lograr mejorar nuestra calidad de vida, somos un país que promete mucho, las expectativas son positivas, nos califican bien a nivel internacional, pero este nuevo comienzo tiene que reflejarse en bienestar para nuestra gente, esa luz que irradiamos al mundo tiene que servir para irradiar luz en nuestras comunidades y hogares, con mejor educación, salud y empleos.