Google premia a investigadores de México, Brasil, Colombia y Chile
En total se presentaron 301 proyectos, que fueron evaluados por un panel de 15 ingenieros.
Dos investigadores mexicanos, ocho brasileños, un colombiano y un chileno ganaron hoy los primeros Premios de Investigación de Google en América Latina, a los que el gigante tecnológico ha destinado más de un millón de dólares.
Los doce ganadores, cuatro de ellos mujeres, presentaron propuestas de investigación que tienen como objetivo aportar beneficios prácticos a la sociedad en general y se destacan en términos de impacto, originalidad y calidad, señaló Google.
"Lanzamos estos premios en América Latina porque creíamos que se estaba haciendo investigación de excelencia en la región y queríamos apoyarla", señaló el portavoz de Google Berthier Ribeiro Neto.
"Google siempre ha considerado la investigación como base esencial para la innovación: no olvidemos que la propia Google nació de un proyecto de doctorado de dos estudiantes de Stanford", agregó.
En total se presentaron 301 proyectos, que fueron evaluados por un panel de 15 ingenieros. Los ganadores recibirán ayuda económica para realizar su investigación.
Entre los proyectos ganadores hay tres dedicados a cuestiones de salud, que tienen que ver con la diabetes, la demencia y el dengue, varios enfocados en inteligencia artificial y lo que se conoce como "machine learning" (aprendizaje de máquinas), uno que tiene que ver con los autos sin conductor y otro con la seguridad en las comunicaciones.
Los ganadores
Los premiados mexicanos son Catalina Elizabeth Stern Forgach y su equipo de la UNAM (Universidad Nacional Autónoma de México), que trabaja con biosensores para el monitoreo de la diabetes, y Carlos Gershenson, también de la UNAM, que busca desarrollar un simulador de código abierto para coordinar de manera segura a los vehículos autotripulados en las intersecciones de calles.
Otros galardonados son los brasileños Sandra María Aluisio, de la Universidad, de la Universidad de Sao Paulo-Sao Carlos, que investiga la detección temprana de la demencia, y Gustavo Enrique de Almeida Prado Alves Batista, también de la USP-Sao Carlos, cuyo proyecto se centra en el control de los mosquitos transmisores de la fiebre de dengue mediante el uso de sensores inteligentes.
Jussara Marques de Almeida, de la Universidad Federal de Minas Gerais, ganó un premio por un proyecto para desarrollar nuevas estrategias de recomendación de etiquetas en la web, y Diego Raphael Amancio, de la USP-Sao Carlos, por una propuesta enfocada en eliminar la ambigüedad del sentido de las palabras.
Otros ganadores que trabajan en el área de la inteligencia artificial son Anna Helena Reali Costa (también de la USP), Altigran Soares da Silva, de la Universidad Federal de Amazonas, Diego de Freitas Aranha de la Universidad Estadual de Campinas, y Marcos André Gonçalves de la Universidad Federal de Minas Gerais.
"Enseñar" a las computadoras a comprender las expresiones faciales humanas es el objetivo del proyecto de otro galardonado, el científico colombiano Pablo Arbeláez, de la Universidad de los Andes.
El matemático Arbeláez, un "cerebro" recuperado para Colombia, pues tras siete años en California regresó en 2014 a su país para trabajar e investigar, dijo que el premio es "muy importante" y no solo porque le permitirá desarrollar su proyecto.
"El premio es un reconocimiento de que la investigación que hacemos en Colombia y en 'los Andes' es relevante en un área internacional", dijo.
En el área del mejoramiento de la experiencia del usuario en la web, Éric Tanter de la Universidad de Chile, ganó con un proyecto para desarrollar un sistema de tipos de seguridad para proteger la información privada.
"Estamos viviendo tiempos emocionantes en los que los avances tecnológicos nos sorprenden día a día. Salud, medio ambiente, planificación urbana: ninguna disciplina queda fuera de la innovación tecnológica", señala un comunicado de Google.
"La investigación juega un papel clave en estos desarrollos. En Google lo sabemos muy bien: la investigación es una parte de nuestro ADN, en la misma medida que la innovación", agrega.