Conflicto Huawei-Google: 'uno depende del otro y se tiene que negociar', según experto
Los usuarios, alrededor del mundo y también en Panamá de los teléfonos inteligentes de la compañía china Huawei, se mantienen en expectativas por cómo se vaya a desarrollar el conflicto entre Estados Unidos y China.
Tras la inclusión de Huawei en la lista negra de exportación del Departamento de Comercio de Estados Unidos, Carlos Alvarado, gerente general de Frontera Security y experto en tecnología, explica que el tema se tiene que ver desde las diferentes aristas que intervienen.
Mencionó que, en primer lugar, las empresas chinas han estado manteniendo un crecimiento exponencial en los últimos años donde poco a poco van desplazando a las marcas de Estados Unidos.
“Con la masa crítica que tienen en China se apalancan y van dominando el mercado…”, manifestó.
Recalcó que uno depende del otro y que no hay un país que pueda estar cerrado a los demás, por lo que se tiene que resolver mediante la negociación.
Por otra parte, desde el punto de vista de seguridad, como la compañía no solo fabrica teléfonos, sino que tienen una gama de productos tecnológicos y puede llegar a tener el control de redes de diversos servicios, se crea una dependencia muy fuerte de la marca.
Con lo anterior, Alvarado plantea que pudieran existir lo que se conoce como “backdoors”, que son solicitados por gobiernos a los fabricantes de tecnología, por si se dan casos de seguridad nacional.
Si se mantiene la medida, lo que va a pasar es que los teléfonos se van a ir desactualizando, al igual que las aplicaciones y en un momento dado el aparato va a dejar de funcionar apropiadamente.
Ya la compañía ha adelantado que estaría lanzando su propio sistema operativo, dice el experto, con lo que surgirá una nueva fuerza.
También se refirió al riesgo para otros competidores, ya que Huawei tendría una especie de monopolio en cuanto al desarrollo de la tecnología 5G, que permite que mayor cantidad de dispositivos se puedan mantener conectados por metros cuadrados.
Afirma que, mediante la implementación de esa red, va a tener control prácticamente del mundo porque tendría acceso a los sistemas bancarios, de transporte, hospitalarios y muchos otros servicios más.