El peor accidente de tránsito registrado en Panamá
Lo que se esperaba que fuera un día normal, convirtió al 24 de mayo de 1971, como el día que se registró el peor accidente de tránsito en nuestro país. En este hecho de tránsito ocurrido en el Puente de las Américas hubo 38 fallecidos y cinco sobrevivientes.
Todo empezó cuando el bus de la ruta de La Chorrera - Panamá con placa G1-0020 y con 43 pasajeros a bordo, se dirigía a la ciudad en horas de la mañana.
A eso de las 6:15 a.m., por el Puente de las Américas, ese bus conducido por Florentino Ramos, sufrió un desperfecto mecánico rebasando a otro bus de la misma ruta, perdiendo Ramos el control del vehículo, que se estrelló contra la baranda izquierda del puente, la cual no soportó el impacto, cayendo al vacío desde unos 48 metros de altura.
El bus cayó en el área de depósitos de petróleo de Balboa, localizada en La Boca. Los que laboraban en ese lugar salieron a ver lo que había sucedido tras el estruendo. Inmediatamente se dio la alarma a los servicios de emergencia en la ciudad.
A los pocos minutos del accidente, llegaron equipos de rescate y dieron los primeros auxilios a los sobrevivientes, mientras que los fallecidos eran llevados en ambulancia a la morgue del Hospital Gorgas.
Este hecho ocasionó gran conmoción, congregando a decenas de personas en los predios del Hospital Gorgas, quienes estaban ansiosas de conocer detalles de lo ocurrido y de las personas que viajaban en ese bus.
El Gobernador de la Zona del Canal, David S. Parker, ordenó que todas las banderas ondearan a media asta. También emitió una resolución en la que expresaba sus condolencias a los familiares de los fallecidos. Se solidarizó donando 38 ataúdes.
El entierro se realizó en el Cementerio Municipal de La Chorrera, y el acto tomó mayor relevancia cuando el general Omar Torrijos acompañado de su comitiva y del presidente Demetrio Lakas, participó del cortejo fúnebre y del acto religioso.
La mayoría de las personas fallecidas residían en la barriada San Antonio y por un mes entero el alcalde de La Chorrera, Temístocles Arjona, ordenó la suspensión de actividades bailables.