¿Cómo murió Jeffrey Dahmer? Los escalofriantes detalles de la muerte del 'Caníbal de Milwaukee'
A tres décadas de su muerte, el caso de Jeffrey Dahmer continúa fascinando y horrorizando al público.
Jeffrey Dahmer, el nombre que se convirtió en sinónimo del horror y la perversión, encontró un final tan violento como las vidas que sesgó. El 28 de noviembre de 1994, hace ya 30 años, en la Institución Correccional de Columbia en Wisconsin, Dahmer, conocido como el "Caníbal de Milwaukee", fue brutalmente asesinado a golpes por su compañero de celda, Christopher Scarver.
Los horripilantes detalles de sus asesinatos, así como los trágicos intentos fallidos de informar sobre sus asesinatos antes, conmocionaron y cautivaron al mundo cuando finalmente se descubrieron sus crímenes. Tras un mediático juicio, Dahmer fue condenado a 16 cadenas perpetuas consecutivas por los atroces crímenes cometidos entre 1978 y 1991, donde violó, asesinó y desmembró al menos a 17 hombres jóvenes, además de practicar canibalismo y necrofilia con algunos de ellos.
Su futuro parecía encaminado a pasar el resto de sus días tras las rejas, pagando por sus actos. Sin embargo, el destino le deparaba un final aún más macabro. Scarver, un recluso con un pasado violento, aprovechó una oportunidad para acabar con la vida de Dahmer y de otro preso, Jesse Anderson.
Según Scarver, la motivación detrás de su acto fue la repulsión que sentía hacia Dahmer y sus crímenes. El asesino en serie, había llevado a cabo simulacros grotescos con alimentos en la prisión, reviviendo así sus horrores pasados. En una entrevista para el New York Post en 2015, Scraver confesó que Jeffrey Dahmer esculpía cuerpos humanos con los alimentos que les daban en la cárcel y usaba kétchup para simular la sangre, lo que perturbaba profundamente a otros presos.
La mañana del 28 de noviembre, Dahmer, Scarver y fueron asignados a limpiar el baño del gimnasio sin supervisión ni grilletes. Scarver cuenta que cuando se preparaba para empezar a trapear el piso, uno de los hombres le dio un codazo en la espalda, pero no supo quién era.
"Me di la vuelta y vi que Dahmer y Jesse se reían entre dientes", recuerda Scarver. "Los miré directamente a los ojos y no podía decir quién lo había hecho". Los hombres se separaron y Scarver, sacó de su bolsillo un recorte de periódico sobre los crímenes de Dahmer y lo confrontó. Al verse acorralado, Jeffrey intentó huir, pero Scarver le bloqueó la puerta y lo golpeó brutalmente con una barra de metal de 50 centímetros y 2,5 kilos del gimnasio. Dahmer fue encontrado por los guardias a las 8:10 am con heridas graves en la cabeza y declarado muerto en el hospital una hora después. Durante el ataque, Anderson también corrió la misma suerte que el asesino serial, pues Scarver también lo mató a punta de golpes.
En entrevistas posteriores, Scarver explicó que su ataque no fue solo una reacción al comportamiento burlón de Dahmer en prisión, sino también al desprecio que sentía por sus crímenes. “Algunas personas en prisión muestran arrepentimiento, pero Dahmer no era una de ellas”, afirmó.
La falta de supervisión en el momento del ataque generó críticas hacia el sistema penitenciario. Las autoridades penitenciarias argumentaron que Dahmer estaba consciente de los riesgos al convivir con otros prisioneros, pese a que había solicitado mayor protección.
Reacciones a la muerte de Dahmer
La noticia de su asesinato generó opiniones divididas. Muchas personas, incluidas las familias de las víctimas, expresaron alivio porque Dahmer no viviera para cumplir sus condenas, mientras que otros consideraron que su muerte fue demasiado rápida para el nivel de sufrimiento que había causado. El fiscal E. Michael McCann calificó el suceso como "el capítulo final de una vida extremadamente triste".
¿Quién fue Christopher Scarver?
De acuerdo a los reportes de aquella época, Christopher Scarver fue un hombre con una vida complicada, marcada por los problemas con las drogas y el alcohol. En 1990, Scarver trabajaba como carpintero y le había exigido a su superior, Steve Lohman, un dinero que supuestamente le debían, pero Lohman tan solo le dio 15 dólares. La respuesta de Scarver fue matarlo de un disparo en la cabeza, lo que le trajo como consecuencia una condena de cadena perpetua en la Correccional de Columbia, la misma a la que dos años después iría Dahmer.
Después de matar a Dahmer y a Anderson, y ser condenado a dos cadenas perpetuas adicionales a la que ya tenía, Scarver ha estado encarcelado en el Centro Correccional Centennial de Canon City, en Colorado, a más de 1,700 kilómetros del lugar en el que terminó con la vida de un temido asesino en serie cuyos horrores están más de actualidad que nunca. De él se tienen pocos detalles, pero se sabe que en 2015 publicó un poemario titulado God Seed y que envía cartas a su hijo de 27 años.
A tres décadas de su muerte, el caso de Jeffrey Dahmer continúa fascinando y horrorizando al público, generando libros, documentales y debates sobre cómo alguien puede llegar a cometer actos tan atroces y cómo la sociedad puede prevenir tragedias similares en el futuro.