Mujer es condenada a 9 años de cárcel por robar 1.5 millones de dólares en alitas de pollos
Vera Liddell
En medio de la peor crisis sanitaria que enfrentó Estados Unidos con el Covid-19, esta maestra se aprovechó de las circunstancias para realizar un millonario desfalco.
Una extrabajadora de una escuela en Illinois en Estados Unidos fue sentenciada a 9 años de prisión después de haber confesado el robo de 11 mil cajas de alitas de pollo valoradas en 1.5 millones de dólares. La comida estaba destinada a estudiantes durante el confinamiento provocado por la pandemia del Covid-19.
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Vera Liddell, maestra y directora de servicios de alimentos del Distrito Escolar 152 de Harvey ideó un esquema fraudulento que le permitió robar miles de cajas de alitas de pollo durante 19 meses, desde julio de 2020 hasta febrero de 2022.
Valiéndose de su posición como directora de servicios de alimentos y aprovechando la crisis sanitaria generada por la pandemia del covid-19 que obligó a las escuelas a cerrar sus puertas y adoptar el aprendizaje remoto, Liddell realizó pedidos masivos de alitas de pollo con un valor acumulado de US$1.5 millones que nunca llegaron a manos de los alumnos de la escuela. A través de su proveedor principal, Gordon Food Service, la maestra de Chicago ordenaba los productos y los recogía utilizando vehículos del distrito. Este método le permitió desviar grandes cantidades de comida sin dejar rastro evidente, pues el distrito escolar continuaba proporcionando las cajas sin imaginar que los estudiantes jamás recibieron los alimentos.
El desfalco se descubrió cuándo el distrito se dio cuenta de que el sistema escolar excedía el dinero presupuestado de forma anómala. Un gerente comercial de una escuela descubrió que los costes de la comida superaban ya en 300.000 dólares el presupuesto acordado, aunque todavía quedaban meses para que acabara el curso.
Este desfase presupuestario llevó a una investigación más profunda, que destapó la existencia de órdenes de compra fraudulentas firmadas por Liddell para cantidades masivas de alitas de pollo, un alimento que nunca fue servido a los estudiantes debido a que contenía huesos, lo cual lo hacía inapropiado para los menús escolares.
Los investigadores realizaron entrevistas con empleados de Gordon Food Services que dijeron que estaban familiarizados con Liddell debido a las enormes cantidades de alitas de pollo que compraba, según los fiscales. El video de vigilancia mostró que Liddell llegaba a las instalaciones de Gordon Food Services para recoger la comida, firmar un teclado electrónico reconociendo que recibió las alitas de pollo y luego facturar al distrito escolar por los artículos, según el documento de la corte.
Este sorprendente fraude no solo dejó sin acceso a estos alimentos a los niños, sino que también significó una pérdida millonaria para el distrito.
En enero de 2023, Liddell fue arrestada y acusada de varios cargos, incluyendo robo, falsificación y operar una empresa criminal continua. Tras varios meses de juicio, la maestra se declaró culpable de un cargo de robo en conexión a un esquema de malversación masiva de fondos y fue sentenciada a 9 años de cárcel.