¿Por qué Minecraft es el videojuego que sí deberías permitir jugar a tus hijos?
Minecraft
Desde el lanzamiento de su primera versión hace quince años en Suecia, el juego Minecraft se ha convertido en un fenómeno global, usado por todo tipo de jugadores con fines educativos, arquitectónicos, sociales y artísticos, que van más allá del simple pasatiempo. Minecraft, que festeja sus 15 años el 17 de mayo, nació de la imaginación del sueco Markus "Notch" Persson. Con más de 300 millones de copias vendidas, es el juego más exitoso de todos los tiempos.
La agencia internacional de noticias AFP habló con cuatro usuarios de este videojuego de construcción con ladrillos y bloques para saber qué efecto tuvo Minecraft en su trabajo y en su vida.
La jugadora
Yang Ji-yeong se convirtió en una de las "influencer" de videojuegos más populares de Corea del Sur en la última década, con millones de seguidores en distintas plataformas como YouTube. Su principal atracción son los videos jugando al Minecraft.
"Creo que el mayor activo de Minecraft es la libertad pura que ofrece. No tiene un conjunto de normas y objetivos fijos, sino que da al usuario la libertad de jugar de la forma que crean adecuada", dice esta surcoreana de 34 años.
Sus retransmisiones, al principio solo una los fines de semana, se hicieron tan populares que le permitieron dejar su trabajo y dedicarse a ellas a tiempo completo, explicó en 2016 a la agencia de prensa local Yonhap. Casi una década después, Minecraft le sigue ofreciendo formas nuevas de conectar con la gente, asegura Yang.
"Recientemente me invitaron a jugar en un servidor extranjero y me sorprendió descubrir que podía jugar, interactuar y comunicarme con usuarios de distintas partes del mundo sin compartir el mismo idioma o cultura", explica.
El estudiante
El parisino Raphael Mesbah descubrió Minecraft con cinco o seis años de edad. Tres lustros después, estudia medicina y sigue profundamente enganchado al juego. "Minecraft es como una segunda vida", dice el joven de 20 años. En 2022, Mesbah se embarcó en un ambicioso proyecto: construir el sistema de metro de París, línea por línea, en Minecraft.
El gran plan precisaba de ayuda y Mesbah la encontró en Grindr, una aplicación de citas para el colectivo LGBT. Gracias a la comunidad de jugadores de Minecraft creada en esa aplicación, ha conseguido completar tres líneas de metro. "Es un juego simple y barato. Mucha gente de mi generación ya tiene una cuenta en él", afirma. "Es el juego de mi corazón y siempre termino volviendo a él".
La biblioteca virtual
Minecraft ofrece un lienzo enorme para construir mundos enteros que sus jugadores pueden explorar. Sus usuarios han erigido todo tipo de estructuras: desde casas fantasiosas a réplicas del mundo real como aeropuertos.
Reporteros Sin Fronteras (RSF) ha usado el juego para combatir la censura en partes del mundo donde el acceso a la información está estrictamente controlado o incluso prohibido. La oenegé abrió "La Biblioteca Sin Censura" en Minecraft el 12 de marzo de 2020, que atesora escritos de periodistas prohibidos en países como Rusia, Irán y Arabia Saudita.
"Todas las plataformas en línea son canales que permiten sortear la censura", afirma a la AFP Vincent Verthier, director de tecnología en RSF. "Minecraft o Fortnite son videojuegos, pero también ayudan a la gente a comunicar e intercambiar", asegura.
Construida con más de 12,5 millones de bloques por parte del aclamado estudio de diseño internacional Blockworks, la biblioteca es actualizada regularmente por el equipo de RSF. Casi 25 millones de personas de 160 países la han visitado desde su creación, según la ONG.
El profesor
Cuando Graham Warden se convirtió en profesor de una escuela en el estado de Texas, en el sur de Estados Unidos, descubrió que Minecraft era "una parte omnipresente" en la vida de sus alumnos. El maestro de 32 años explica que la estructura del juego representa una herramienta muy útil para aprender y resolver problemas porque los jugadores "piensan de forma distinta" cuando manipulan objetos y ambientes en Minecraft.
"Son cosas que no solemos hacer en la vida real, con lo que ser capaz de cambiar de el ambiente mental lo convierte en una gran herramienta para todo tipo de cosas, incluido el aprendizaje", afirma.
Para él, el juego también se convirtió en una forma de conectar con gente. "Recientemente, al descubrir que era autista, necesitaba encontrar formas de conectar de modo distinto, porque nunca había sentido que conectara con nadie", cuenta.
"Conocí un grupo que usaba Minecraft para tener una comunidad. Tener una tarea repetitiva como excavar en el juego puede aportar la monotonía necesaria para inspirar una conversación, por muy raro que parezca".