¡Les llovió granizo! Concierto de Louis Tomlinson termina en tragedia
Louis Tomlinson
Siete hospitalizados y noventa heridos deja una fuerte tormenta de granizo minutos antes que iniciara el concierto del ex One Direction, Louis Tomlinson.
Mientras los fanáticos esperaban al cantante, a las 9:30 de la noche del miércoles, comenzó a caer granizo sobre ellos. Aunque intentaron buscar un refugio para evitar la tormenta, siete personas quedaron hospitalizadas y otras 90 resultaron heridas con cortes, contusiones y huesos rotos.
Mucha preocupación y medio se vivió en la previa de un show de Louis Tomlinson en el Anfiteatro Red Rocks en Colorado. En varios videos y fotos se puede ver el gran tamaño del granizo y el trabajo de los socorristas fuera del anfiteatro con las víctimas que sufrieron huesos rotos y algunos cortes.
“Estoy sangrando y tengo fuertes golpes en la cabeza por el granizo. Espero que todos hayan salido a salvo”, escribió un fanático en sus redes. “Tengo una mano rota por el granizo” contó otro de los fan.
Varios fans mostraron el tamaño del granizo en las redes sociales.
Tomlinson también agradeció la rapidez de los socorristas por atender a sus fanáticos. “Quiero agradecer la rapidez y el cuidado de mi personal de gira y los socorristas que trabajaron incansablemente anoche para ayudar a cuidar a todos los afectados en circunstancias tan extremas”.
Tomlinson finalizó el comunicado diciendo: “Estamos trabajando arduamente para encontrar una fecha reprogramada para el espectáculo, así que conserve sus boletos hasta que tengamos más información. ¡Recupérate pronto y volveré pronto a Red Rocks!”.
Sin embargo, las redes sociales están llenas de fanáticos que critican a los organizadores del evento, revelando que se habían visto obligados a protegerse del granizo mientras sufrían heridas y que mientras estos huían el staff se reía.
"Los empleados de Red Rocks no hicieron nada por ayudarnos. AMBAS manos de mi madre están rotas sólo porque quería protegernos a mi amiga y a mí. Todos estamos en el hospital y algunos empleados de Red Rocks se reían y grababan a gente sollozando, asustada y dolorida".