Impactante tragedia en Six Flags: joven muere tras sufrir traumatismo cerebral por montaña rusa

Un día de diversión se transformó en una pesadilla para la familia de Christopher Hawley, un joven universitario de 22 años que perdió la vida horas después de subirse a la montaña rusa X2 en el parque Six Flags Magic Mountain, ubicado en California.

Hawley, quien acababa de graduarse de la Universidad de San Diego, visitó el parque temático acompañado de su hermano menor y un primo. Durante su estadía, decidió experimentar la popular atracción X2, descrita en documentos judiciales como una montaña rusa “extremadamente ruda” por su intensidad y características físicas. Al finalizar el recorrido, Hawley presentó signos evidentes de malestar: necesitó sujetarse de una baranda para mantenerse en pie y se quejó de un fuerte dolor de cabeza, antes de perder el conocimiento.

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El personal del parque lo atendió inicialmente en una carpa médica dentro de las instalaciones, pero dada la gravedad de su condición, fue trasladado de emergencia a un hospital cercano. Al día siguiente, falleció. El informe forense confirmó que la causa de su muerte fue una lesión cerebral traumática, específicamente un traumatismo craneoencefálico severo.

La familia de Hawley sostiene que su muerte fue directamente provocada por la fuerza de la montaña rusa X2 y ha presentado una demanda contra Six Flags Magic Mountain. En el texto legal, se denuncia que el parque tenía conocimiento de incidentes previos relacionados con la misma atracción, donde otros usuarios habrían sufrido lesiones cerebrales, en la espalda, cuello y columna vertebral. La acusación subraya que los avisos de seguridad proporcionados a los visitantes no reflejan adecuadamente los riesgos reales asociados con el uso de dicha montaña rusa.

“El parque estaba al tanto de que esta atracción había causado supuestas lesiones traumáticas en otros pasajeros, pero aun así no reforzó sus advertencias ni mejoró las medidas de seguridad”, señala la demanda, citada por PEOPLE. Los familiares aseguran que Christopher Hawley gozaba de excelente salud y que su muerte fue evitable.

Este caso plantea cuestionamientos sobre los protocolos de seguridad en parques de diversiones y el deber de advertencia que tienen los operadores de estas atracciones. La demanda busca compensación por los daños sufridos, pero sobre todo, respuestas claras sobre cómo una montaña rusa pudo haberle arrebatado la vida a un joven en plenitud de su vida.

Mientras el proceso legal avanza, la tragedia de Christopher Hawley se convierte en un llamado de atención para reforzar los estándares de seguridad en parques temáticos y garantizar que ninguna familia más tenga que enfrentar una pérdida tan repentina y dolorosa.