Hombre se gana el premio más grande en la historia de la Lotería Electrónica y luego lo acusan de haberse 'robado' el billete

Alzándose con el bote del Powerball, Castro reclamó la impresionante cifra de 204 mil millones de dólares, el premio más alto jamás otorgado por esta lotería. Sin embargo, lo que debería haber sido una celebración de ensueño pronto se vio empañado por una demanda repentina.

Después de reclamar su premio y optar por la suma global una decisión que, tras los impuestos, redujo la cifra a 997 millones de dólares, según la Lotería de California, Castro comenzó a disfrutar de su nueva vida de lujo. Compró dos casas multimillonarias en California, una para él y otra para su familia, y adquirió una colección de vehículos deportivos. Además, comenzó a viajar por el mundo, disfrutando de todas las comodidades que su fortuna le podía proporcionar.

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No obstante, su suerte parecía peligrar cuando José Rivera, un hombre de 42 años, presentó una demanda ante la policía, afirmando que el billete ganador de Powerball le pertenecía y que había sido robado por Castro. Según el relato del demandante, un hombre llamado Urachi “Reggie” Romero, quien alquilaba una habitación en su casa, fue el responsable del robo. Rivera alegaba que Romero le quitó el boleto ganador la noche anterior al sorteo, y que luego se lo entregó a Edwin Castro, a quien Rivera nunca había conocido.

Esta acusación llevó a que el caso llegara hasta los tribunales, generando una oleada de atención mediática. Rivera demandó no solo a Romero y Castro, sino también a la Lotería de California. En su testimonio, sostuvo que el billete le fue sustraído sin su conocimiento, una noche antes de que se anunciara el ganador, pero no presentó pruebas claras que corroboraran la secuencia de los hechos.

La falta de evidencia contundente jugó un papel clave en el desenlace de la demanda. Aunque la policía y los investigadores de la Lotería de California realizaron una investigación sobre las alegaciones, pronto surgieron dudas sobre la veracidad del informe de Rivera. Según documentos obtenidos por TMZ, las autoridades consideraron que el testimonio del demandante podía tratarse de una denuncia falsa.

Finalmente, el juez del condado de Los Ángeles desestimó el caso el 30 de septiembre de 2023, citando la falta de pruebas y las leyes que rigen la propiedad de los billetes de lotería. En los documentos judiciales, el magistrado fue claro al afirmar: “Los jugadores son los únicos responsables de asegurar sus entradas contra robo, pérdida, daño o destrucción. La persona en posesión de un billete de lotería ganador es el presunto propietario/ganador”.

La decisión del tribunal no solo liberó a Castro de cualquier reclamo legal, sino que también reafirmó su estatus como el legítimo ganador del mayor premio en la historia del Powerball. Mientras Rivera no logró demostrar la supuesta conexión entre el robo del billete y Castro, este último pudo continuar disfrutando de su fortuna sin mayores complicaciones legales.