TVN plus En vivo

Clásicos del arte, la literatura y el cine entran en dominio público en 2025: Popeye, Tintín y más

Obras

Desde el 1 de enero, cientos de obras icónicas creadas en 1929 han pasado al dominio público en Estados Unidos.

Una persona observa en un museo una obra sobre Popeye
Una persona observa en un museo una obra sobre Popeye / AFP

Esto permite que estas obras sean copiadas, compartidas y adaptadas sin restricciones legales. La transición marca un hito que incluye personajes de cómics, películas legendarias, composiciones musicales y novelas fundamentales de la literatura mundial.

La literatura es uno de los grandes beneficiados de este cambio. Entre las obras que ahora podrán ser usadas libremente destacan títulos como El ruido y la furia de William Faulkner, Adiós a las armas de Ernest Hemingway, Una habitación propia de Virginia Woolf, Cosecha roja y El halcón maltés de Dashiell Hammett, y Cartas a un joven poeta de Rainer Maria Rilke.

Además, se suma a la lista la primera traducción al inglés de Sin novedad en el frente, la desgarradora novela de Erich Maria Remarque que retrata los horrores de la Primera Guerra Mundial.

Te puede interesar: Cortes de cabello y peinados que marcarán tendencia en 2025

Te puede interesar: Armie Hammer rompe el silencio sobre las acusaciones de abuso sexual y fantasías de canibalismo

El dominio público también alcanza al mundo del cine, con la incorporación de películas pioneras del sonido. Entre ellas figuran Chantaje de Alfred Hitchcock, que marcó el debut del director británico en el cine sonoro, y The Black Watch, la primera película sonora de John Ford. También se incluyen Dinamita de Cecil B. DeMille y otras producciones que rompieron barreras en el séptimo arte.

Jennifer Jenkins, directora del Centro para el Estudio del Dominio Público de la Universidad de Duke, explicó que este acceso abre posibilidades creativas. “En años anteriores celebramos la llegada de Winnie-the-Pooh y el primer Mickey Mouse al dominio público. Este año continuamos con Popeye, Tintín y más aspectos de Mickey de sus encarnaciones de 1929”, afirmó.

Los fanáticos de los cómics celebran la llegada de personajes tan emblemáticos como Popeye el marino, creado por Elzie Crisler Segar, y Tintín, el joven periodista belga que debutó en el semanario juvenil Le Petit Vingtième en 1929. Estos personajes, fundamentales en la historia de las historietas, ahora pueden ser reinterpretados y adaptados libremente.

En cuanto a Mickey Mouse, este 2025 se suman nuevas animaciones de sus primeras versiones, como The Karnival Kid, donde por primera vez el icónico ratón habló en pantalla.

El dominio público no se queda atrás en la música. Obras icónicas como el Bolero de Maurice Ravel y Un americano en París de George Gershwin ahora son de libre uso. Sin embargo, los derechos se limitan a las partituras, ya que las grabaciones originales siguen protegidas por un copyright independiente.

También figuran composiciones de artistas destacados como Cole Porter y el jazzista “Fats” Waller, cuyas piezas podrán ser utilizadas en nuevas creaciones musicales.

Entre las obras plásticas, tres piezas icónicas de Salvador Dalí han ingresado al dominio público: Placeres iluminados, Las acomodaciones del deseo y El gran masturbador. Estos trabajos representan momentos cruciales en la carrera del genio surrealista y ahora podrán ser reinterpretados y difundidos sin restricciones legales.

Con la entrada de estas obras al dominio público, se abre un abanico de posibilidades para artistas, creadores y empresas, quienes ahora tienen acceso a un tesoro cultural sin límites. Desde reinterpretaciones modernas hasta adaptaciones innovadoras, el 2025 promete ser un año donde las grandes obras del pasado se fusionarán con las ideas del presente.

Jennifer Jenkins concluyó: “El dominio público no es solo una cuestión de derechos legales; es un regalo a la cultura global, permitiendo que estas obras cobren nueva vida en las manos de artistas contemporáneos y lleguen a nuevas generaciones”.

En una era donde la creatividad florece más que nunca, estas piezas icónicas del siglo XX están listas para escribir un nuevo capítulo en la historia del arte y la cultura.

Temas relacionados

Si te lo perdiste
Lo último
stats