Muerte de Matthew Perry lleva a la DEA tras una oscura red de drogas en Hollywood

El actor Matthew Perry de 54 años, quien murió el 23 de octubre de 2023, falleció en complicadas circunstancias en su propiedad ubicada en Los Ángeles. Las causas de su deceso se debieron a los efectos agudos de la Ketamina y la buprenorfina, que se acrecentaron con el ahogamiento y la enfermedad coronaria.

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La Ketamina es un anestésico disociativo que se utiliza principalmente en la medicina para la inducción y el mantenimiento de la anestesia, así como para el manejo del dolor. También ha encontrado uso en el tratamiento de la depresión resistente a otros tratamientos, debido a su capacidad para producir efectos antidepresivos rápidos.

La buprenorfina es un opioide utilizado principalmente para el tratamiento del dolor crónico y la terapia de sustitución en la adicción a opioides. Actúa como un agonista parcial de los receptores opioides, proporcionando alivio del dolor y reduciendo los síntomas de abstinencia en personas que están dejando de usar opioides más fuertes.

Sin embargo, la muerte del actor desencadenó investigaciones del Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD), en colaboración con la Administración de Control de Drogas (DEA) y el Servicio de Inspección Postal de Estados Unidos, con respecto a una red de drogas en Hollywood, que en realidad podrían haber hecho de la muerte de Perry un homicidio involuntario.

“Cualquiera que haya estado involucrado en la utilización inapropiada de ketamina para Matthew debería ser procesado”, dijo Marty Singer, abogado de Hollywood que trabajó con el actor durante décadas y quien ha estado involucrado en un análisis más profundo sobre las causas de la muerte de la estrella de Friends.

El profesional en derecho se ha mostrado preocupado por el uso de ketamina del actor e hizo un llamado a enjuiciar a los responsables de su suministro indebido.

Incluso, estarían llevando a cabo una investigación contra una actriz, todavía no anunciada, a quien habrían fotografiado junto a Perry en el consultorio de un médico conocido por prescribir ketamina.

Al respecto, Tracy Walder, exagente especial del FBI y la CIA, dijo que podrían presentarse múltiples cargos, destacando el incremento de redes de drogas que utilizan el correo para enviar medicamentos con receta, lo cual es un delito federal que podría dar una sentencia de cinco años de prisión.