'Se van a encontrar pronto sospechas de vida en el Universo'
El desafío de encontrar vida fuera de La Tierra, uno de los mayores que enfrenta la astronomía, podría empezar a resolverse en un plazo de cinco o diez años, según Silvia Torres-Peimbert, presidenta de la Unión Astronómica Internacional, que celebra en Viena hasta el día 30 su Asamblea General trianual.
"Otro gran desafío es encontrar vida en el Universo. Cómo se origina, si se encuentra o no, y yo pienso que se va a encontrar pronto, porque es tan intensa la búsqueda que es fácil pensar que va a haber huellas de, o sospechas de vida cuando menos", explica la astrónoma mexicana en una entrevista con Efe.
"No sé si se encuentra la vida, pero va a haber sospechas de vida. De que la hubo o de que la hay, va a haber toda clases de nuevos hallazgos en eso", explica.
Aunque con cautela, Torres-Peimbert opina que en "cinco o diez años" podrían encontrarse esos indicios, aunque mantiene la duda de cuán definitivos serán.
"Se van a encontrar pruebas, pero qué tan definitivas, quién sabe. Eso es más difícil. Van a encontrar sospechas, indicaciones. No sé cómo describirlo, qué vamos a encontrar. Pero sí va a haber. Pronto", resume esta investigadora del Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Torres-Peimbert recuerda que esa búsqueda se está realizando tanto en el creciente número de exoplanetas que se van detectando, de los que se recibe una información más "fragmentaria", como en varios candidatos del Sistema Solar, como Marte o Europa, un satélite de Júpiter.
Pero incluso en estos objetos más cercanos será difícil lograr pruebas directas, ya que siempre se dependerá de los datos que envíen los instrumentos de las sondas y naves que, afirma, "siempre están sujetos a crítica".
En cualquier caso, la experta señala su preocupación por las "fantasías" que puede generar la búsqueda de vida y de planetas habitables, como una forma de enfrentar miedos existenciales como los que causa, por ejemplo, el cambio climático.
"No podemos salir, no podemos explorar. Podrán explorar unos cuantos exploradores, podrán colonizar un grupo muy escogido de personas, pero con eso no vamos a salvar la Humanidad", afirma.
Entre la multitud de temas en la agenda de Asamblea se incluye seguir analizando las ondas gravitatorias; la explicación de cómo el seguimiento de la órbita de la estrella S2 verifica la teoría general de la relatividad; o recordar los hitos de los cien años de historia de la Unión, que se cumplen en 2019.
La presidenta de la Unión Astronómica Internacional (UAI) también se refiere a cómo ideas sin ninguna base científica, como el terraplanismo, se propagan, especialmente por las redes sociales, y ganan cada vez más adeptos.
"Nos gustaría poder detener este influjo de tonterías, pero realmente somos menos y, además, resulta que estas personas tienen una mejor plataforma pública, tienen una mejor forma de llegar al público, son relaciones públicas y entonces no podemos competir. Ellos ganan la atención del público", lamenta.
"Nosotros querríamos decirles 'oiga, fíjense en la verdad'", dice Torres-Peimbert, que afirma que otras ciencias también sufren de este tipo "fake news" como el creacionismo.
Ante esa lucha, Torres-Peimbert dice que no parece suficiente el gran esfuerzo que los divulgadores científicos están haciendo para traducir la ciencia a algo más accesible para el gran público.
"Eso es lo que está pasando, no sabemos como atenderlo, somos menos. O menos fuertes", admite.
Torres-Peimbert reivindica también la importancia de instituciones como la UAI y de eventos como esta Asamblea General, que con 3.000 participantes de 88 países, es el principal foro de esta disciplina y un ejemplo de colaboración internacional.
La astrónoma mexicana reconoce que los crecientes enfrentamientos diplomáticos y políticos en el mundo afectan a esa colaboración, pero que justo organizaciones como la que ella preside logran hacer puentes.
"De hecho -afirma- los científicos siempre han hecho puentes antes que los políticos", aplaude Torres-Peimbert, quien afirma que hay una "vanguardia de internacionalismo entre los científicos".