EEUU incumplirá por un tercio la meta de reducción de gases invernadero fijada por Obama
Estados Unidos incumplirá por un tercio la meta de reducción de gases de efecto invernadero inicialmente fijada por Barack Obama en el marco del Acuerdo de París para 2025, según un informe publicado este miércoles con motivo de una reunión sobre el clima en San Francisco.
Las emisiones de gases de efecto invernadero estadounidenses deberían haberse reducido un 17% en 2025 en relación a 2005, cuando el presidente Obama había fijado la meta de -26% como mínimo, según el estudio encargado por la coalición de ciudades, estados y empresas America's Pledge (La promesa de Estados Unidos), que midió y contabilizó los compromisos medioambientales de estos actores no federales.
El estudio, financiado por la organización filantrópica del multimillonario y exalcalde de Nueva York Michael Bloomberg, se publicó con ocasión de la Cumbre Global de Acción Climática que se inaugura este miércoles en San Francisco (California) y en la que participarán delegados de todo el mundo.
Pero estas cifras muestran, según los autores, que la brecha puede colmarse hasta -21%, o incluso -24%, si se revisan al alza los compromisos de los actores no federales.
"El objetivo de Obama siempre iba a ser difícil de alcanzar", explicó Paul Bodnar, director del Rocky Mountain Institute, uno de los creadores del modelo que permitió obtener estas previsiones.
"Este trabajo demuestra de manera rigurosa que los estados, las ciudades y las empresas tienen el pode de llevar al país a las puertas de este ambicioso objetivo, por sí mismos", dijo en la presentación a la prensa.
Pero según Mary Nichols, la vicepresidenta de la coalición America's Pledge, para recuperar el atraso "todo el mundo tiene que comprometerse", no solo los estados federales sino también el gobierno federal, que tiene jurisdicción exclusiva sobre las explotaciones petroleras y de gas federales.
Pocos meses después de llegar al poder, el presidente estadounidense Donald Trump anunció la retirada de Estados Unidos del Acuerdo de París de 2015.
En paralelo lanzó el proceso para anular las medidas de Obama sobre las centrales de carbón y sobre las normas anticontaminación para los vehículos.
Estas decisiones llevaron a numerosos gobernadores y alcaldes demócratas de Estados Unidos así como a algunas empresas a actuar a su nivel para mantener los objetivos iniciales del acuerdo de París.
Hasta 2020, la caída más fuerte de las emisiones será posible gracias a la reducción de la producción de electricidad a favor de fuentes renovables de energía. Varios estados y ciudades han adoptado calendarios exigentes, posibles gracias a la caída del coste de la energía solar desde los años 2010.
En paralelo entre 2006 y 2016, un 15% del parque estadounidense de centrales de carbón cerró, apunta el informe, un ritmo que se mantiene todavía hoy a pesar del apoyo de la administración Trump al sector.