Alertan sobre el peligro de inhalar gases que ha desprendido Volcán de Fuego
La Organización Mundial de la Meteorología (OMM) alertó hoy de los potenciales riesgos para la salud provocados por la inhalación de los gases provenientes de la erupción del Volcán de Fuego en Guatemala, que ha afectado a 1,7 millones de personas.
La portavoz de la entidad, Clare Nullis, explicó en rueda de prensa que distintas entidades y organismos están monitoreando las consecuencias de la erupción, entre ellos la NASA, que evalúa los gases expelidos por el volcán.La portavoz de la entidad, Clare Nullis, explicó en rueda de prensa que distintas entidades y organismos están monitoreando las consecuencias de la erupción, entre ellos la NASA, que evalúa los gases expelidos por el volcán.
De los análisis se desprende que hay altos índices de concentración de dióxido de azufre en la atmósfera, unos componentes que, de ser inhalados, son perniciosos para la salud.
Por ahora, "no está claro" cómo afectarán estos gases a la población local, ya que se desconoce cuánto tiempo persistirán en la atmósfera ni que área cubrirán, dado que depende mucho de las condiciones atmosféricas.
Nullis explicó que también se sopesa la concentración y el recorrido de las cenizas volcánicas por si eventualmente afectan a la aviación.
El gobierno guatemalteco pidió ayer ayuda internacional, 96 horas después de la violenta erupción del volcán que ha causado 107 muertos y 197 desaparecidas.
La portavoz de la ONU en Ginebra, Alessandra Vellucci, explicó que un equipo de coordinación de Naciones Unidas ha tasado las necesidades en las áreas más afectadas por la erupción y está ayudando al Gobierno en la respuesta humanitaria ofreciendo asistencia psicosocial, y repartiendo kits de higiene, colchones e insumos.
Un estudio que también intentan realizar la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El portavoz de ACNUR, William Spindler, explicó que la evaluación profunda se ha retrasado a causa de la persistente actividad volcánica, pero que la agencia tiene un equipo sobre el terreno y que el personal que lo conforma está registrando las necesidades de las personas que están en refugios, "cuyo números siguen creciendo".
Spindler indicó que de esas primeras evaluaciones de esos centros de acogida se desprende que deben mejorarse los servicios sanitarios, crear espacios de seguridad para mujeres y niños, y proveer de electricidad a los que carecen de ella.
Según datos oficiales hay 4.137 damnificados acogidos en refugios, 21 de ellos oficiales y 23 improvisados.