¿Cenicienta eres tú? Joven deja un zapato en la casa real de Dinamarca en el cumpleaños del príncipe Christian

El pasado 15 de octubre, se celebró el cumpleaños número 18 del príncipe heredero al trono de Dinamarca en el palacio Christiansborg de Copenhague. El príncipe Christian invitó a diferentes representantes de la realeza europea, desde Amalia de Países Bajos a Ingrid de Noruega o Elisabeth de Bélgica, se dieron cita allí para disfrutar de la celebración. Sin embargo, una de ellas dejó olvidado su zapato en palacio.

La fiesta contó con una Cenicienta real, pues una de las invitadas dejó su tacón con dos tiras cruzadas en el empeine y en purpurina dorada. El servicio de limpieza inició con sus labores y se encontró con la pieza, lo que causó revuelo en todo el palacio. Desde las redes sociales de la Casa Real danesa se hicieron eco de lo sucedido, y empezó la búsqueda de la “princesa” perdida.

¿Quién era la cenicienta que había olvidado su zapato? Esta era una de las preguntas que se hacían desde la cuenta oficial del palacio ya que mostraron una foto de la sandalia en cuestión. Fue tanta la polémica que, el canal de televisión danesa TV2 tomó cartas en el asunto y decidió repasar las imágenes de la recepción para ver, invitada por invitada, a quién podría pertenecer.

Luego de una exhaustiva búsqueda, la misteriosa y olvidadiza invitada resultó ser Anne-Sofie Toernsoe Olesen, una joven de Egedal, al norte del país. La cual confesó que había dejado el zapato a propósito. Explicando que pensó que era una excelente ocasión para que el cuento clásico se hiciera realidad, "Esto es algo que solo va a pasar una vez en mi vida, así que mejor hacerlo". dijo en su entrevista.

“A mí también me pareció un poco gracioso, y lo hablé antes con mi familia y mis amigos, que estuvieron de acuerdo en que lo hiciera”, agregó la joven.

Anne también contó que intentó recrear la escena de la película de Disney en dos ocasiones. La primera vez que quiso emitir la escena en la que Cenicienta olvida su zapato en las escaleras del palacio, la jugada no le salió como esperaba, pues alguien se dio cuenta y se lo devolvió. Así que lo dejó caer en una segunda ocasión y se marchó corriendo. La joven volvió a su casa con un solo zapato, pero con la convicción de que la experiencia que acababa de vivir era única.

“Pensé que simplemente no podía ser y que tenía que conseguirlo, así que cuando mi amiga y yo salimos del palacio por las escaleras, lo dejé caer y me apresuré a marcharme para que nadie pudiera detenerme”, le contó a TV2. 

La joven mencionó que solo buscaba hacer reír al personal de la casa, más no encontrar un príncipe amoroso como en el cuento. Luego de dar con su paradero, la casa real iba a tirar el zapato a la basura hasta que su propietaria pidió que fuese devuelto. Como símbolo de un buen recuerdo.