Maná conquistó el Rod Carew con un concierto inolvidable

Tal y como se había previsto, la noche del martes fue un verdadero caos movilizarse por la vía Centenario debido al concierto de Maná en el Estadio Nacional Rod Carew que pese al descomunal tranque fue un verdadero éxito y dejó a los más de 15 mil fanáticos que asistieron al estadio con el corazón lleno de felicidad y con la sensación de haber vivido una noche inolvidable. Y es que Maná se tiró tremendo concierto cargado de un repertorio espectacular que los asistentes cantaron de principio a fin. La espera de siete años valió la pena para quienes anhelaban volver a vivir esta experiencia.

No obstante, pese al operativo vial que implementó la Dirección de Operaciones del Tránsito de la Policía Nacional, y por más que los organizadores del evento pusieron a disposición transporte gratuito para trasladar a los fanáticos desde Altaplaza Mall hasta el estadio, nada evitó que cientos de conductores quedaran atrapados en un tranque de proporcione épicas que empezó a cocinarse antes de las 5 de la tarde. El caos fue tal que decenas de fanáticos se vieron obligados a emprender el camino a pie desde el mall hasta el estadio para llegar a tiempo y lo mismo ocurrió a la salida del recinto deportivo. Pero ni el tranque, ni la caminata menguaron la ilusión y la felicidad de los miles de fanáticos que tenian su boleto en mano.

La banda de rock-pop panameña, Los 33 fueron los encargados de abrir el concierto que dicho sea de paso inició a la hora pautada, algo que destacaron los asistentes, ya que era un día de semana y era importante que se cumplieran con los tiempos pautados para que los fanáticos no se trasnocharan más de la cuenta. Tras la presentación de Los 33, llegó el momento de la banda mexicana. Fer, Alex, Juan y Sergio salieron al escenario llenos de energía y con la determinación de ofrecer un espectáculo de altura, como siempre lo han hecho. Canciones como “En el muelle de san blas”, “labios compartidos”, “rayando el sol”, “Mariposa traicionera”, “Oye mi amor” fueron coreadas a más no poder. Además, durante el show, Fer contó algunas anécdotas, habló de la importancia de cuidar el planeta, se acordó de Rubén Blades al que calificó como "un maestro" y dijo que lo que más le había gustado de la jerga panameña era eso de la "manga larga", adjetivo con el que nos referimos a la cerveza grande y que en México es conocida como "caguamas". La banda mexicana cantó por espacio de dos horas y media hasta la media noche y finalizó con un bonito juego de pirotecnia que iluminó la noche.