¡Desgarrador! La historia de Belka, la perra que espera a orillas de un río congelado a su dueño que murió ahogado

En las heladas riberas del río Ufá, en Bashkiria, Rusia, la mascota se ha convertido en un símbolo de lealtad inquebrantable.

Belka / X @efenoticias

Día tras día, desafía el peligro y regresa al mismo punto donde su dueño murió trágicamente al caer al agua helada. Es una historia que ha conmovido a una región entera y que resuena más allá de sus fronteras, como un recordatorio de la conexión profunda entre los animales y los humanos.

El 24 de noviembre, el dueño de Belka, un hombre de 59 años, intentó cruzar el río Ufá en bicicleta. A pesar de las bajas temperaturas, el hielo era frágil, de apenas dos centímetros de espesor, y no soportó su peso. El hombre cayó al agua helada, donde encontró la muerte. Su bicicleta fue encontrada a siete metros de profundidad, pero su cuerpo fue recuperado días después, a nueve metros bajo el hielo.

Te puede interesar: Anna Nicole Smith | El ascenso, caída y trágico final de la icónica conejita de Playboy

Te puede interesar: Video | Mujer se fue de compras con tres robots Tesla y se vuelve viral

Desde ese día, Belka regresa al lugar donde ocurrió la tragedia. “La perra sigue esperando a su dueño”, afirmó Kiril Pervov, presidente interino de Emergencias en Bashkiria, en una publicación en Telegram. Sus palabras estuvieron acompañadas de imágenes desgarradoras que muestran a la perra erguida sobre el hielo, mirando hacia el horizonte, como si esperara ver aparecer a su compañero.

Belka no se deja disuadir. Familiares del hombre y rescatistas han intentado llevarla a casa, pero ella siempre encuentra el camino de regreso al río. Según testigos, camina sobre el hielo en círculos, desafiando el peligro, guiada por una esperanza que parece no apagarse.

“Es como si estuviera buscando algo invisible, algo que solo ella puede sentir”, comentó un testigo. Incluso cuando el hielo amenaza con ceder bajo sus patas, Belka sigue adelante, ignorando el frío y el riesgo.

Las autoridades, impactadas por la historia, han intentado mantenerla a salvo. Los rescatistas la retiran del hielo repetidamente, pero Belka no se rinde. “Su lealtad nos recuerda el vínculo inquebrantable que puede existir entre un animal y su humano”, declaró Pervov.

El nombre de Belka, que en ruso significa “ardilla”, tiene un significado especial. En su origen, evoca a uno de los perros que viajaron al espacio en la era soviética, un nombre asociado con valentía.

Su historia ha capturado la atención de las redes sociales, donde los usuarios la han descrito como un símbolo de amor y devoción. Algunos incluso han pedido que se le brinde un hogar donde pueda sanar.

Temas relacionados

Si te lo perdiste
Lo último