Países del grupo BRICS aspiran a ser motores de la economía global
Las países del grupo BRICS, foro que integran Brasil, Rusia, la India, China y Sudáfrica, cerraron hoy su VIII cumbre con una renovada apuesta por erigirse en motores de la economía global, tras una reunión que estuvo marcada por las condenas al terrorismo impulsadas por el país anfitrión.
"El potencial y la fuerza de los BRICS en términos de recursos, mercado, fuerza de trabajo no han cambiado y el desarrollo a largo plazo de los BRICS es todavía positivo", indicó el presidente chino, Xi Jinping, durante una de sus intervenciones en la jornada de hoy.
Con alrededor de un 43 % de la población mundial, el 30 % del Producto Interior Bruto (PIB) planetario y el 17 % del comercio global, los BRICS insistieron durante su reunión en el estado de Goa, en el oeste de la India, en que deben ser los impulsores de la economía global.
Para ello, el presidente ruso, Vladímir Putin, pidió una cooperación industrial "más efectiva" entre los países miembros, así como "armonizar" los procedimientos de aduanas y más políticas antimonopolio, para que el rol internacional de los BRICS "continúe creciendo".
"Los BRICS deben impulsar la IV revolución industrial", con internet y las nuevas tecnologías como punto central, destacó por su parte el presidente sudafricano, Jacob Zuma, que insistió en la posición demográfica de los BRICS como "una ventaja real".
El anfitrión del encuentro, el primer ministro de la India, Narendra Modi, pidió continuar el proceso de construcción institucional del BRICS, más comercio entre sus miembros y mayor cooperación internacional para influir en las decisiones globales.
"En 2015, el mercado intra-BRICS se situó en torno a los 250.000 millones de dólares. Deberíamos imponernos una meta para doblar esta cifra hasta los 500.000 millones de dólares para 2020", exigió Modi.
Además, el presidente brasileño, Michel Temer, pidió que el BRICS sea "el catalizador" de los negocios de sus miembros.
"Serán especialmente bienvenidas aquellas empresas capaces de mejorar estructuralmente nuestras economías, sectores que fortalecerán nuestra competitividad y la presencia global de los BRICS", subrayó el presidente brasileño.
Sin embargo, la cumbre estuvo marcada por la insistencia del gobernante indio en abordar el asunto del terrorismo, un reclamo que Nueva Delhi ha colocado en el primer punto de su agenda internacional tras los últimos incidentes con Pakistán.
Hace unas semanas, un ataque de insurgentes presuntamente paquistaníes contra una base militar en la región de Cachemira india costó la vida a 19 soldados, lo que motivó una renovada ofensiva diplomática de la India en todos los foros contra su vecino.
En la declaración final de la cumbre se incluyó una condena "del terrorismo en todas sus formas y manifestaciones".
"Condenamos de manera enérgica los recientes ataques contra algunos países del BRICS, incluido ese en la India", remarcó la declaración final, que no contó sin embargo con una llamada de atención concreta contra Pakistán, como buscaba el anfitrión Modi.
Los BRICS destacaron que detrás de la falta de crecimiento están "los persistentes riesgos para la economía global", como conflictos regionales, el terrorismo, el flujo de refugiados o la incierta situación en el Reino Unido tras decidir abandonar la Unión Europea.
Además, remarcaron la importancia de "la solidaridad y la cooperación" entre los países de grupo BRICS basada en los "intereses comunes" y la necesidad de dar pasos concretos para que los países en vías de desarrollo posean más capacidad de representación.
Entre los pasos a dar pidieron que los países europeos cumplan su promesa de ceder dos asientos en el órgano ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI).
"La reforma del FMI debería fortalecer la representación y la voz de los miembros más pobres del Fondo, incluida la África Subsahariana", anotó la declaración.
Esa inclusión también fue reclamada para la Organización Mundial del Comercio, a la que el grupo pidió un funcionamiento "transparente y no discriminatorio", aunque mostró su apoyo a ese sistema de comercio multilateral, más allá de los mecanismos regionales.