Ministros afirman que se enteraron del escándalo de Volkswagen por los medios
El titular alemán de Transportes, Alexander Dobrindt, y el primer ministro del estado de Baja Sajonia, Stepahn Weil, miembro del consejo de supervisión de Volkswagen (VW), afirmaron hoy en la comisión que investiga el escándalo de las emisiones que se enteraron del mismo por los medios de comunicación.
Ambos políticos comparecieron en la comisión parlamentaria, en la que uno de los responsables de los laboratorios de pruebas de la Comisión Europea reconoció que en 2011 se publicó un informe que mostraba que vehículos de diversas marcas superaban en carretera los límites de emisiones contaminantes, aunque sostuvo que no se pudieron averiguar las causas.
Weil y Dobrindt garantizaron a los diputados que no tuvieron conocimiento con antelación de que VW hubiera instalado un software en millones de motores diésel para trucar las emisiones, manipulación que denunciaron públicamente las autoridades medioambientales estadounidenses en septiembre de 2015.
Weil negó expresamente las acusaciones de Ferdinand Piëch, expresidente de la compañía, quien, según han filtrado varios medios, ha señalado ante la Fiscalía de Braunschweig que diversos directivos del grupo, como Weil y su sucesor en el cargo, Martin Winterkorn, tenían conocimiento de la manipulación mucho antes de lo que han reconocido.
El primer ministro de Baja Sajonia, estado que tiene una participación del 20 % en VW, aseguró que se quedó consternado al escuchar las noticias, "el punto más bajo en la historia de la empresa", según el comunicado difundido por el Bundestag (cámara baja alemana) al concluir la reunión de la comisión.
Tras indicar que la revisión de vehículos marcha a toda máquina, defendió que, a diferencia de en Estados Unidos, en Europa los clientes no vayan a ser indemnizados, ante el diferente marco legal.
El ministro de Transportes defendió, por su parte, el proceder del Gobierno tras salir a la luz la denuncia estadounidense y recordó que sólo dos días después creó una comisión de investigación para aclarar todos los detalles de lo sucedido.
En la misma comisión compareció el funcionario europeo Alois Krasenbrink, responsable de uno de los laboratorios de la Comisión Europea y que explicó que desde 2005 se prueban vehículos en carretera, no sólo en laboratorio.
En una examen, apuntó, se detectó que diversos modelos diesel superaban los límites de emisiones contaminantes.
El estudio, en el que fueron analizados dos modelos diesel de VW, dos de Fiat, uno de Renault y un BMW, fue publicado en 2011, pero las causas de la desviación de los valores registrados en las pruebas en carretera respecto a las de laboratorio no pudieron ser verificadas.
Krasenbrink subrayó que no son "desarrolladores de motores" y aseguró que no hubo conocimiento del uso de dispositivos para falsear los datos hasta septiembre de 2015.