El gobierno de Biden confirma que quiere aumentar impuestos a empresas en EEUU
Washington/El gobierno de Joe Biden quiere un alza de impuestos para las empresas para financiar sus prioridades que incluyen un plan de infraestructura, indicó este martes la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, en una audiencia ante la Cámara de Representantes.
Biden "fue claro sobre sus propuestas fiscales", declaró Yellen ante la Comisión de Servicios Financieros de la Cámara Baja. El gobierno quiere llevar el impuesto a la renta empresarial de un 21% actual a un 28%, señaló.
Se espera que Biden presente pronto su propuesta de un masivo plan de infraestructura orientado a crear empleo y combatir el cambio climático, ayudando así a la economía estadounidense a superar la crisis del covid-19.
Pero después de la aprobación de un inmenso plan de alivio para los hogares y las empresas por 1,9 billones de dólares, el mandatario está bajo presión del Congreso para mantener controlado el gasto.
"Creo que un paquete que incluya inversión en las personas, inversión en infraestructura, va a ayudar a crear buenos empleos para la economía estadounidense y los cambios en la estructura fiscal son los que van a ayudar a pagar esos programas", indicó Yellen.
Varios medios estadounidenses reportaron que Biden está considerando un gasto en infraestructura por un total de 3 billones de dólares, que serán distribuidos en varios proyectos de ley.
La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, indicó en un tuit el lunes por la noche que con un nuevo plan el gobierno "se concentrará en los empleos y la forma de mejorar la vida de los estadounidenses".
Los republicanos, pero también sectores más conservadores del Partido Demócrata, se oponen a un endeudamiento adicional, luego de que el gobierno ya desembolsara más de billones de dólares para ayudar a las empresas y los hogares.
Yellen argumentó en la audiencia que la carga tributaria para las empresas es de un volumen "muy bajo".
Según Politico -que cita un estudio del gobierno- el promedio de la tasa impositiva de las empresas estadounidenses es en realidad muy inferior al 21% y se ubica cerca del 7,8% tras la gran reforma fiscal adoptada por los republicanos en 2017.
El gobierno de Biden expresó que quiere revertir esta reforma que en el momento de su aprobación generó duras críticas de los demócratas ya que favoreció a empresas multinacionales y a los hogares de mayores ingresos. Entonces, los expertos ya advirtieron que las empresas no pagaban la tasa impositiva real.
Estados Unidos enfrenta además la decadencia de su infraestructura, ya que la mayor parte de las autovías, puentes, vías férreas y aeropuertos fueron construidos entre la década de 1950 y 1970.
Trabajo de "lobby"
"Tres billones de dólares es mucho dinero, máxime cuando llegarían luego de paquetes de estímulo por casi seis billones de dólares" en un año, destacó Gregory Daco, economista de Oxford Economics.
"Pero la diferencia fundamental es que las medidas de urgencia, entre ellas los cheques a las familias, tienen un efecto puntual, mientras que las inversiones en infraestructura buscan promover el crecimiento en el largo plazo", explicó.
Las empresas comenzaron su trabajo de "lobby" y una coalición de 140 grupos dirigidos por la Cámara de Comercio Estadounidense y el Bipartisan Policy Center exhortó a los legisladores a que voten un proyecto de ley para el 4 de julio, el día de la Independencia. Pero no quieren oír hablar de alzas de impuestos.
Este martes, Yellen compareció junto al presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, al Congreso. El exmandatario republicano Donald Trump eligió a Powell para reemplazar a Yellen, que antes estuvo a la cabeza del emisor estadounidense.
Powell insistió en que es necesario apoyar a la economía, ya que afirmó que Estados Unidos está "lejos" de una recuperación tras la recesión provocada por la pandemia, y una vez más desestimó el riesgo de un brote inflacionario de largo plazo.
"No esperamos que la inflación se mueva al alza en el curso de este año", dijo el presidente de la Fed.