La brasileña Petrobras negocia venta de activos en gas a la japonesa Mitsui
La estatal prepara desde hace varios meses una operación para crear una subsidiaria en la que reunirá a las 19 distribuidoras de gas que controla y que abastecen todos los estados de Brasil.
La petrolera brasileña Petrobras informó hoy que está en la "fase final de negociación" para venderle al grupo japonés Mitsui el 49 % de la participación en una subsidiaria en la que aglutinará todas sus distribuidoras de gas.
La mayor empresa brasileña, controlada por el Estado pero cuyas acciones son negociadas en las bolsas de Sao Paulo, Nueva York, Madrid y Buenos Aires, ya es socia de Mitsui en ocho distribuidoras regionales de gas natural en Brasil.
La estatal prepara desde hace varios meses una operación para crear una subsidiaria en la que reunirá a las 19 distribuidoras de gas que controla y que abastecen todos los estados de Brasil.
Igualmente venía negociando desde hace algunas semanas la venta a un socio privado de parte de esos negocios y la decisión final estaba entre Mitsui Gas e Energia do Brasil, la subsidiaria brasileña del grupo japonés, y la china Beijing Gas.
Petrobras informó en su comunicado al mercado que la conclusión de las negociaciones con Mitsui solo depende de la aprobación del respectivo contrato y de sus condiciones por parte de la dirección y el consejo de administración de la estatal, así como del visto bueno de los órganos reguladores competentes.
La estatal informó igualmente que la operación, "realizada mediante un proceso competitivo" en el que participaron varias empresas interesadas, forma parte del programa de desinversiones que anunció este año.
Con el plan, que prevé la venta entre este año y 2016 de activos por hasta 15.100 millones de dólares, Petrobras busca hacer frente a la grave crisis provocada por la caída de sus ganancias, el desplome de los precios del petróleo en el mercado internacional, la elevación de la deuda y las dificultades de captación.
Dicha crisis se agravó por el gigantesco escándalo de corrupción del que la empresa es protagonista y que, según los cálculos de Petrobras, le originó pérdidas por cerca de 2.000 millones de dólares, lo que ha elevado aún más las dificultades en las captaciones.
Mitsui Gas es una de las numerosas empresas investigadas por posibles desvíos de recursos en contratos con la petrolera.
La reestructuración de la empresa para crear una subsidiaria que aglutine las distribuidoras de gas, obligará a Petrobras a crear otra compañía que se quede con los activos referentes a gasoductos y plantas térmicas de generación de energía alimentadas con gas.