¿Viviendas sociales y baratas en Panamá? No, no hay
La propia Convivienda, el consejo de empresarios que construyen viviendas en Panamá, reconoce que en el país no hay oferta de residencias por menos de $50 mil. No la hay ni habrá a corto plazo.
Elisa de Suárez, presidenta del gremio, explica que la razón está en cómo se han disparado los costos de construcción. Además, dice, los procesos legales “que antes oscilaban en dos años, nos toma ahora entre tres y cuatro, por lo que hacer casas de interés social es prácticamente imposible”.
Aunque en 2016 las viviendas que más se vendieron en el país fueron las de entre $65 mil y $80 mil, hay un importante segmento de la población que no puede adquirir ni siquiera esa oferta.
Las Naciones Unidas y el Observatorio Urbano de Panamá –en el que participan importantes especialistas y universidades locales- estableció en 2015 que el 40% de los panameños no puede comprar la vivienda más barata.
En el otro extremo, según Convivienda, cerca del 77% de los que sí pueden convertirse en compradores adquieren viviendas en el rango de interés preferencial ($60 mil a $120 mil), pero los constructores dicen estar perdiendo la capacidad de tener suficiente oferta para ellos.
“Estamos tratando de ver qué hacemos con ese rango. Hay buena intención del presidente, estamos a la espera de que firme el documento que crea una comisión para estudiar el tema”, dice Elisa Suárez.
El viceministro de Vivienda, Jorge González, asegura que el Gobierno quiere “incentivar medidas anticíclicas para que haya celeridad no sólo en los procesos, sino con el dinero: que más gente pueda acceder a este tipo de vivienda”.
Pero mientras el Gobierno convierte en realidad su aspiración, no habrá casas sociales y el rango de vivienda subsidiada podría seguir enflaqueciéndose. Los empresarios no tienen planes de construir casas de ese tipo hasta que se evalúen los procedimientos y se evalúen los costos de construir en el país.
Con datos de María De Gracia