Panamá no quiere poner plazos a las negociaciones del TLC con China
El ministro panameño de Comercio e Industrias, Augusto Arosemena, dijo hoy que su país no tiene ninguna prisa en firmar un tratado de libre comercio (TLC) con China y que las negociaciones de este acuerdo, que iniciarán previsiblemente en junio, "demorarán lo que tengan que demorar".
"Mi posición siempre ha sido que las negociaciones demorarán lo que tengan que demorar para que Panamá consiga el tratado más beneficioso para el país. Si eso se puede hacer en dos rondas, se hace en dos rondas. Si demora diez, bien también", afirmó Arosemena en una rueda de prensa.
El ministro indicó que los equipos de ambos países concluyeron el jueves un "estudio de factibilidad" de cara al inicio de las negociaciones del TLC, en el que se establece que es "conveniente" para Panamá y China un acuerdo comercial de esa envergadura y en el que se comprometieron a "trabajar en una relación ganar-ganar".
"No tenemos ningún apuro para terminarlo, lo importante es que tengamos un acuerdo que sea beneficioso para ambas partes y que las profesiones que son restringidas para panameños se mantengan protegidas y que los productos que son sensitivos para Panamá sean protegidos también", insistió el funcionario.
Arosemena aseguró además que "va a ser un proceso bastante dinámico" y recordó que las negociaciones de tratados de libre comercio con grandes potencias como Estados Unidos y Canadá duraron "uno y dos años aproximadamente".
Panamá decidió en junio del año pasado romper relaciones diplomáticas con Taiwán y reconocer el principio de "una sola China", convirtiéndose así en el segundo país centroamericano, después de Costa Rica, en establecer relaciones diplomáticas con la República Popular China.
Panamá y China ya mantenían un importante intercambio comercial antes de establecer relaciones diplomáticas, pero se espera un notable crecimiento del mismo cuando ambos países acuerden un TLC.
"El reto que tenemos es que un socio comercial como China no pide un pallet (caja) de piñas sino que grandes cantidades. Tenemos que trabajar para tener la capacidad de poder cubrir su demanda", reconoció.
Arosemena señaló también que se espera que a finales de este mes se inaugure el primer vuelo directo entre Pekín y la capital panameña, que será operado por la aerolínea estatal Air China y hará una parada técnica en Houston (sur de EE.UU.).
En 2016, Panamá vendió a China un total de 50,9 millones de dólares en desechos de cobre, crustáceos, madera y café, entre otros, mientras que el gigante asiático le vendió al país centroamericano bienes y servicios por 1.183 millones de dólares, según las cifras oficiales.
El país asiático es además el segundo usuario más importante del Canal de Panamá y el primer proveedor de la Zona Libre de Colón, la zona franca más grande del hemisferio, ubicada en el Caribe panameño.