Gremio empresarial insiste en que 'no es el momento' para aumentar el salario mínimo

La situación de desempleo que se vive en Panamá y que no se había registrado desde hace 15 años, fue uno de los factores que impidió que se pudiera establecer un nuevo rango de salario mínimo, por lo que se deberá esperar por la determinación que haga el Gobierno Nacional.

Así lo ha manifestado el presidente de la Cámara de Comercio Industrias y Agricultura de Panamá (Cciap), Jorge Juan de la Guardia, quien resaltó que la tasa de desempleo se mantiene en 7.1% y que ha estado incrementando en los últimos años.

Recalcó que el país, “en este momento” no está preparado para que se establezca un nuevo salario mínimo, porque se han estado viviendo las consecuencias de los aumentos que se dieron en los últimos años.

Desde el 2002 al 2018, se aumentó el salario mínimo en un 98% y el aumento compuesto está por el 115%.

De acuerdo con de la Guardía, aumentar el salario mínimo generaría más desempleo y “es preferible que haya más personas empleadas con un buen salario como el que se tiene, a que haya más personas buscando trabajo”.

Todo tiene que ver con el hecho de que la economía ha crecido a un ritmo más lento en comparación al que se dio en los últimos diez años y según las estimaciones que se han hecho, el crecimiento económico de Panamá será de 3.5% para el 2019. En el 2018 el crecimiento alcanzó el 3.7%.

El presidente del gremio empresarial dijo que el potencial de crecimiento de Panamá debería superar el 5% para generar la empleabilidad que se requiere.

La decisión se tiene que tomar con responsabilidad y en base a cifras económicas, ya que Panamá tiene que poder ser competitiva no solo en la región, sino a nivel mundial.

La cifra de aumento salarial que presentó el sector laboral fue de 25% con lo que el salario mínimo quedaría en B/1,300.00, sin embargo, el presidente de la cámara empresarial dijo que no se puede tener un aumento de salario que sea desproporcionado.

Por otra parte, dijo que aumentar el salario mínimo representaría una puerta de impedimento para que los jóvenes recién graduados ingresen al sector laboral.