Compras en internet, en la mira de la DGI

Desde antes de la pandemia las compras virtuales, desde Panamá en sitios web del extranjero reportaban un crecimiento exponencial, ya que en ciertas ocasiones suponen un ahorro en comparación con los precios establecidos en las tiendas de retail.

En la actualidad, las autoridades panameñas estudian una iniciativa para gravar las compras que se hagan a través de internet y se hace en dos vertientes, explicó el director de la Dirección General de Ingresos (DGI), Publio De Gracia.

La DGI se encuentra estudiando una situación global a través de los organismos internacionales y una situación local de cómo esas adquisiciones de bienes pueden dar una contribución basado en el actual Código Fiscal.

Discusión internacional

Detalla que, la DGI aborda el tema “de manera responsable” ya que, en América Latina, algunos gobiernos ya han tomado decisiones en relación a gravar ese tipo de consumos.

Agrega que las actuales autoridades mantienen una relación con instituciones internacionales como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), donde se desarrolla una discusión de una línea base para que, de alguna manera, las naciones del mundo puedan tributar la economía digital.

En el mes de diciembre, Panamá tuvo representación en un foro en el que estuvieron presentes las plataformas reconocidas a nivel global”, además de representantes del Banco Interamericano de Desarrollo, El Banco Mundial y el Centro Interamericano de Administraciones Tributarias.

De Gracia explica que, como administración Tributaria Panameña, la DGI quería integrarse a la discusión y lo que propusieron fue que cuando se definan las herramientas, el país pueda impulsar un plan piloto con futuras administraciones.

Sin embargo, reiteró que “ese tema se encuentra en discusión y de una manera responsable lo están revisando”.

Campo nivelado

Recalca que en la actualidad no se puede hablar de un nuevo impuesto, tampoco de porcentaje, ni de cuánto recaudaría el Estado, ya que, en el caso de las compras internacionales por medio de las plataformas, podría incluirse dentro del impuesto selectivo de consumo o del ITBMS.

La administración tributaria panameña no ha tomado ningún tipo de decisión al respecto, pero sí es importante que la economía tradicional y la economía digital tengan un campo nivelado, expresó el funcionario a TVN-2.com.

Por otra parte, detalló que, en conversaciones con la Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá, se ha manifestado el ejemplo de una tienda de electrodomésticos o tecnología, que tiene planilla donde hay panameños, que pagan un impuesto de introducción por la venta de ese tipo de productos, por lo que sugieren que se cree un campo nivelado.

En estos momentos estamos en estudios, guiados por las decisiones globales”, expresó De Gracia.

Descartó que se pretenda establecer un doble tributo, porque no puede existir y por eso es importante alinearse con los estándares que se discuten a nivel internacional, para impulsar un campo nivelado para todos.

En la entidad buscan ser eficientes en la recaudación de impuestos, pero destaca que la pandemia de la COVID-19 impuso nuevos retos, sin embargo, no cree que se tengan que aumentar impuestos.

Explica, en tanto, que, si en algún momento se tiene que incluir a la economía digital en la tributación, eso se estaría basando en los actuales parámetros que establece el Código Fiscal panameño.

Por ejemplo, si se introduce un producto que tiene la obligación de pagar impuesto, se debe hacer porque se debe mantener la trazabilidad. De hecho, ya se desarrollan conversaciones con la Autoridad Nacional de Aduanas para garantizar que los productos que ingresen al territorio nacional, cumplan con las obligaciones tributarias.

En una posible regulación, se incluiría a todas las plataformas y páginas web como Uber, Airbnb, Amazon, Cabify, entre otras.

TVN-2.com trató de obtener la versión de la CCIAP sobre la propuesta del gremio sobre el tema, pero no respondieron al correo con la solicitud.

Tema requiere discusión amplia

Para la abogada especialista en Derecho Digital, Lía Hernández Pérez, se debe desarrollar una discusión muy amplia porque habría temas cruzados, pues se toca transporte, turismo, música, y otros sectores dentro de los cuales se debe incluir también a los influencers.

Contextualiza que en otros países más adelantados en materia normativa en torno a la economía digital como Colombia y México, se ha intentado regular el tema, pero Panamá tiene una particularidad.

“El país se rige por el principio de territorialidad, en materia tributaria, es decir, todo lo que se genera aquí en Panamá debe ser tributado aquí en Panamá, es decir que todo lo que generan esas plataformas no pasan al 100% a esas plataformas”, explica.

Agrega que “Uber o Cabify no tienen una flota de autos, y así mismo la gente que vende cosas a través de internet”, por lo que es necesario definir bien el concepto de a quién se le va a cobrar un impuesto, qué es lo que se va a regular y sobre todo “ser muy transparente en torno a la discusión se vaya a desarrollar del tema”.

Asegura que Panamá como país en vía de desarrollo comete el error de ejecutar ese tipo de discusiones de manera bipartita, solo entre la empresa privada y el gobierno, por lo que ha instado a De Gracia, a tomar en cuenta a todos los sectores que están vinculados en el asunto y a la sociedad civil especializada.

Hub de innovación

La abogada plantea que si Panamá también quiere ser un Hub de las Américas en Innovación Digital no se puede sobreregular, sino aprovechar las ventajas que se tienen como país y potenciarlo.

Si la naturaleza de la iniciativa es equiparar condiciones para que un comercio extranjero esté regido bajo las mismas condiciones que un comercio local, le hace sentido al experto en e-commerce, Elías Manopla.

Dice que en el caso de los vendedores del país, tienen que pagar por el producto, importación, nacionalización, pago de impuesto y luego hacer el recaudo de los impuestos al consumidor, aparte de la declaración de renta que debe hacer a diferencia de las compras a páginas de internet en el extranjero.

Sin embargo, aclara que esas empresas sí tienen que pagar impuestos en el país en el que se encuentran radicadas, por lo que surge el primer cuestionamiento sobre la forma en la que se cobraría un gravamen.

Al igual que la abogada Hernández, Manopla considera que es un tema que amerita una discusión muy amplia, por todo lo que implica para no desatar una guerra de cobro de impuestos.