Las patronales de Francia y Alemania piden reforzar el proyecto europeo
Las patronales de Francia y Alemania pidieron hoy que se refuerce el proyecto comunitario y que se busquen nuevas formas de cooperación entre la Unión Europea (UE) y el Reino Unido tras el resultado del referéndum, que implica la desaparición de ciertas "ventajas tangibles" para los británicos.
"Europa debe fortalecerse, recuperar la confianza y pasar a la ofensiva" tras el éxito del "brexit" (salida del Reino Unido del bloque comunitario), que coloca a la UE "en una zona de fuertes turbulencias", señalaron en un comunicado la patronal francesa, Medef, y las alemanas, BDI y BDA.
Esas agrupaciones de empresarios consideran que "el motor franco-alemán" es "más indispensable que nunca" y debe "recuperar su vigor" porque "encarna la capacidad de los europeos de reconciliarse y unirse, la voluntad común de garantizar la paz y la prosperidad y garantizar un modelo social para sus pueblos", añadieron.
Las citadas patronales enumeraron una serie de "prioridades" para "una integración europea más volcada en los ámbitos clave y para una menor intervención sobre el resto de aspectos que puedan tratarse a nivel nacional".
Así, el Medef, el BDI y el BDA pidieron un "compromiso con los valores de Europa", tales como "asegurar la paz y la seguridad en el continente, garantizar las libertades y el desarrollo de un marco favorable para la competitividad de las empresas europeas con prioridad para el empleo y el crecimiento".
Abogaron, además, por un a "posición común sobre las relaciones exteriores, la política de seguridad y la lucha contra el terrorismo", ámbitos en los que la UE debe "hablar con una sola voz y atribuirse las competencias necesarias", incluido el paso al voto por "mayoría y no por unanimidad en el Consejo Europeo de jefes de Estado y de Gobierno".
Las organizaciones patronales franco-alemanas desean también que se refuerce "el proyecto europeo sobre sus dos pilares económicos, que son el mercado único (...) y el euro", mientras que pidieron para la moneda única "medidas inmediatas, creíbles y visibles para reforzar su gobernanza y alcanzar una verdadera convergencia entre los Estados miembros".
Abogaron también por que un "núcleo de Estados voluntarios" adopten "iniciativas concentradas sobre proyectos de alto valor añadido europeo allá donde la acción asilada de los países se revele impotente", como en la educación sin fronteras, la seguridad energética, la política migratoria, la defensa, el comercio, la protección del medio ambiente y los servicios financieros.
Asimismo reclamaron que se sigan implementando "reformas nacionales" que fortalezcan y hagan más competitiva la economía para "asegurar la perpetuidad" del modelo social.
Por último, apostaron por "identificar y esbozar las nuevas vías de cooperación con el Reino Unido, siempre considerando que, una vez que los británicos han decidido salir (de la UE), se verán privados de un cierto número de ventajas tangibles de la Unión, como el pasaporte financiero europeo" para ofrecer servicios en el bloque continental.