Chile busca modernizar ley de bancos para enfrentar crisis
La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, ingresó hoy al Congreso un proyecto que modifica la Ley General de Bancos, para que estas entidades enfrenten de mejor manera las eventuales crisis o situaciones de inestabilidad del mercado, informaron fuentes judiciales.
Con esta iniciativa, junto con modernizar después de una década la legislación bancaria, Chile adopta los estándares de Basilea III, que establece un conjunto de medidas para fortalecer la regulación, supervisión y manejo de riesgos de este sector.
"Estamos dando un paso más, uno muy importante además, en la construcción de mejores bases para el desarrollo económico, en línea con las otras iniciativas de modernización económica", señaló la jefa de Estado en el Palacio La Moneda, sede del Ejecutivo.
Agregó que su Gobierno, se ha abocado a fortalecer "distintos ámbitos del mercado financiero, de modo tal de hacerlo más sólido, transparente, confiable e inclusivo".
Esta propuesta pretende que los bancos financien sus actividades con una proporción mayor de recursos propios, y aumenten la calidad de las fuentes alternativas de capital.
Este mayor y mejor caudal permitirá absorber más adecuadamente las eventuales pérdidas derivadas de situaciones de inestabilidad o crisis bancaria, evitando que sean los depositantes y los contribuyentes quienes carguen con estas pérdidas.
La actual ley general de bancos data de mediados de los años ochenta y se diseñó como respuesta a la crisis de la deuda de comienzos de esa década.
Hasta ahora, la única modificación sustantiva se realizó en 1997.
El proyecto ratificado hoy contempla el traspaso de las funciones que desempeña la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras a la Comisión para el Mercado Financiero, con el objetivo de tener una institucionalidad "eficaz y moderna".
En segundo lugar, permitirá a los bancos enfrentar choques de distinto tipo, porque se modifican los requerimientos de capital y gestión de riesgos, adaptándolos a los estándares de Basilea III.
"Es importante tener en consideración que todos los cambios contemplados en este proyecto de ley serán implementados de manera paulatina, para que las instituciones cuenten con el tiempo suficiente para adaptarse", consignó la mandataria.
A su vez, explicó que los estándares presentados se han adaptado a la realidad nacional, para no generar impactos que pudieran restar competitividad al sistema bancario local.