López Obrador defiende plan económico por coronavirus con un tuit del papa Francisco
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, recurrió este martes a palabras del papa Francisco para defender su plan económico contra la pandemia de coronavirus tras las duras críticas que ha recibido.
"Seremos juzgados según nuestra relación con los pobres", dijo el mandatario durante su habitual conferencia de prensa al leer el tuit que el papa Francisco publicó el lunes.
"Cuando Jesús dice 'a los pobres siempre los tendréis con vosotros', dice 'yo estaré siempre con vosotros en los pobres, presente en ellos'. Este es el centro del Evangelio, y seremos juzgados por esto", dijo al leer el mensaje del pontífice.
El mandatario respondió así a la crítica de un dirigente empresarial, a quien no nombró, y que señaló que el plan económico de su gobierno por el coronavirus solo se ocupa de los pobres.
"Entonces, ¿por qué primero los pobres? Por humanismo, por solidaridad, pero también en el caso de los que son creyentes, porque esa es la esencia de los evangelios", dijo el presidente.
"No es que se abandone a los que tienen más posibilidades económicas, es que tenemos que darle preferencia a los más necesitados", agregó.
El plan económico que presentó López Obrador el domingo apuesta por mayor austeridad y programas sociales, además de algunos proyectos de infraestructura emblemáticos de su gobierno.
La estrategia ha sido severamente criticada por el sector privado, que señala que se debería apostar por estímulos fiscales para enfrentar la caída esperada en la economía mexicana, que se estima alrededor de 4% en promedio durante 2020.
No es la primera vez que López Obrador hace declaraciones con alusiones religiosas en desafío a la férrea tradición laica mexicana, que establece una estricta separación entre la Iglesia y el Estado.
Semanas atrás mostró amuletos que, según explicó, usa como protección. "Detente enemigo, que el corazón de Jesús está conmigo", dijo al mostrarlos ante la prensa.
El año pasado, se declaró "seguidor de Jesucristo" y se acercó a las iglesias evangélicas para que distribuyeran la llamada "cartilla moral", un guía sobre ética y buenas costumbres, adaptada por su gobierno a partir de un texto del intelectual mexicano Alfonso Reyes.