Ministro designado de Economía y Finanzas aspira a trabajar en armonía con la Asamblea Nacional
Felipe Chapman
Ciudad de Panamá, Panamá/Felipe Chapman deberá tomar decisiones económicas importantes para el país a partir del 1 de julio y este domingo 26 de mayo, habló sobre temas relevantes en De Frente con Sabrina Bacal.
Aunque tiene una relación de confianza que data de hace más de 25 años con el presidente electo José Raúl Mulino, está optimista de que tendrá la independencia necesaria en los temas del ámbito económico.
Dijo que a partir del 1 de julio será un servidor público y se comprometió en producir resultados positivos.
“Mi aspiración es trabajar mancomunadamente, armónicamente con una Asamblea Legislativa, en lo cual yo estoy seguro que hay muchos diputados que comparten esa visión y valores que acabo de comentar, que les anima producir resultados positivos para los panameños”, acotó.
Agregó que entrará con una actitud positiva, por lo que le parece injusto hablar antes de iniciar esta administración, de que deba abandonarla por alguna situación a futuro.
Chapman indicó que entre sus medidas están el crecimiento económico, progreso social, movilidad económica, reducción de la pobreza y mejoramiento de la calidad de vida, que se logra primero generando confianza.
Para el ministro designado, la confianza permitirá que se dinamice el consumo y la inversión, sin dejar de un lado el gasto del sector público, focalizado en crear esa telaraña de infraestructura en inversiones con beneficios para la sociedad panameña y acelerar el crecimiento económico.
Desempleo e informalidad
El desempleo y la informalidad son dos de los problemas económicos y sociales más fuertes después de la pandemia.
En este sentido, Chapman reitera que la informalidad es una de las cosas que le ha quitado el sueño, porque el nivel casi de 50% es altísimo en este país y es un reto gigantesco, dado que el mayor costo de la pandemia fue humano, con pérdida de trabajos formales.
Para ello, dijo que se necesita acelerar el crecimiento económico en sectores que aporten al país, insertándose en la economía 21.
En cuanto al programa de Vejez, Invalidez y Muerte de la Caja de Seguro Social (CSS), Chapman explicó que una de las conversaciones con Mulino ha sido no “rehuir” a los problemas importantes del país, y la CSS es uno de ellos. Aseguró que no va a haber ningún jubilado que se quede sin su pensión, pero para hacer eso sostenible se va a requerir el apoyo de mucha gente.
Advirtió que hay un ánimo constructivo de crear arreglos y cambios que se pueden convertir en referentes para otros países.
Ni descartó, ni dijo que no se va a hacer un alza a los impuestos, pero sí aclaró que después del 1 de julio tiene que confirmar la apreciación en la lectura que tiene de las finanzas públicas.
En cuanto a los subsidios, reconoció que hay algunos que dan buenos resultados como sacar a la gente de la pobreza, pero otros no, y esos hay que examinarlos, para que rindan mejores resultados a la sociedad.
Alegó que incentivos se dan en todas las economías, pero no de forma antojadiza. Chapman dijo que no tendrá poder omnipresente, hará sus planteamientos y recomendaciones, y no se decidirá nada unilateralmente.
Fondo de Ahorro, grado de inversión y minería
En cuanto al Fondo de Ahorro hizo un repaso por la historia. Dijo que nació en la década de los 90 a través del Fondo Fiduciario para el Desarrollo. En Panamá se tomó la decisión que los recursos que se levantaron por una privatización parcial se colocaran en un Fondo de Ahorro, que si no le falla la memoria eran 1,700 millones de dólares.
En tanto, indicó que en un país dolarizado como Panamá, en situaciones naturales de crisis como la pandemia, sin política monetaria para estimular la economía, la única herramienta es política es fiscal, que se traduce en gastar para estimular crecimiento económico. "Un Fondo de Ahorro lo que permite es tener recursos para emergencias", recalcó.
Cree en este tipo de fondos, hacerlo crecer con el tiempo y llevarlo a un nivel del tamaño de la economía, que toma años y tenga un peso relativo donde pueda hacer diferencia para ayudar.
Sobre el grado de inversión, dijo que la confianza y enviar señales, presentando presupuestos creíbles son las medidas que se deben tomar y en el lado del gasto, que la asignación de recursos muestre un compromiso con la responsabilidad y asignación adecuada. esto último, a su juicio, depende del trabajo armónico con la Asamblea Nacional, algo de lo que se encuentra positivo.
Además, habló de un plan quinquenal para cumplir con la Ley de Responsabilidad Fiscal, que muestre las metas a mediano plazo que puede tener el país.
Dejó claro que con o sin actividad minera, el grado de inversión de Panamá se iba a perder.
Con respecto a la mina de Donoso, dijo que hay que tomar una decisión, buscando un consenso, porque el peor escenario es no hacer nada.