Panamá y otros países echan mano de nuevas tecnologías para anticipar amenazas y desastres

Los efectos que el cambio climático está teniendo sobre el planeta llevan a los países a plantearse el uso de nuevas tecnologías para anticipar las amenazas y responder a desastres.

Este año, un informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) alertaba sobre el aumento de las catástrofes y sus efectos negativos sobre los sistemas alimentarios del planeta, que dejan millonarias pérdidas económicas al sector agrícola.

Con el tiempo el mundo ha experimentado el incremento de plagas, inundaciones, granizadas, sequías, ciclones y enfermedades de animales, que provocan daño a la economía y socavan la alimentación.

Por esta situación, varios países evalúan daños y pérdidas y dirigen sus acciones con tecnologías para reducir los riesgos.

Por ejemplo, en Colombia, evalúan el uso de drones sobre los sistemas agropecuarios para identificar los daños y las pérdidas.

En Filipinas han generado un precedente con respecto a los tifones que afectan los sistemas agropecuarios.

En una reciente conferencia de la FAO, expertos debatieron el gran potencial de las herramientas tecnológicas para reducir el riesgo de desastres y una variedad de amenazas naturales, mediante el pronóstico, mapeo y modelamiento en tiempo casi real.

Además, han reiterado que el tema toma cada vez más importancia en las agendas de los encargados en formular políticas y diversos entes sociales, económicos y organismos internacionales.

Edgar Barroso, experto en innovación, director de Laboratorio de Emprendimiento y Transformación en el Instituto Tecnológico de Monterrey, dijo que las tecnologías digitales son esenciales para la evolución de cualquier organización y sector.

Resaltó que no solo se trata de drones, sino de otras tecnologías como satélites, capacidad para mapear y distinguir pequeñas evoluciones en los terrenos, e incluso diferenciar si un edificio se hunde un milímetro.

Todas estas herramientas necesitan datos, una parte que alimenta a las tecnologías y ayuda a que las autoridades puedan organizarse y saber qué ha ido pasando a través de los años.

En tanto, Jorge Gutiérrez, coordinador del Programa Caep II, paquete de mejoras de la FAO Colombia, explicó que una de las líneas de trabajo se orienta a fortalecer los procesos de evaluación de daños y pérdidas en el sector agropecuario.

"Cada vez más está presente el concepto de digitalizar la agricultura", recalcó.

Por tanto, en Colombia se trabaja por fortalecer el sistema y se preparan bloques de información en lo que se avanza en drones y metodologías de evaluación.

Panamá experimenta con ASIS

El Sistema de Índice de Estrés Agrícola (ASIS), es una herramienta desarrollada por la FAO y permite monitorear a nivel satelital la vegetación y el estado de los cultivos para conocer la afectación y el riesgo de sequía agrícola.

La misma se adaptará a Panamá para mitigar sus efectos en los cultivos del sector agropecuario.

De acuerdo con el Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA), los detalles de esta herramienta tecnológica fueron ofrecidos recientemente a los funcionarios de diferentes direcciones de esta entidad.

En un comunicado del MIDA, el ministro de la cartera, Augusto Valderrama, dijo que el taller sobre el manejo de georreferenciación para la agricultura tiene “el propósito de modernizar el ministerio con programas y proyectos que ya están funcionando en varios países, obtener información vía satélite sobre la capacidad de los cultivos, las áreas exactas de siembra de los diferentes rubros, estudios del suelo, humedad y temperatura”.

Agregó que se trata de una nueva corriente y Panamá tiene el compromiso serio como país de modernizarse.

La FAO apoya a Panamá en este camino, sentando las bases para que en poco tiempo el país pueda contar con herramientas tecnológicas que apoyen al sector agropecuario.

Por años, Panamá ha experimentado la sequía en ciertas regiones, principalmente la región de Azuero y provincias centrales, donde se llevan adelante otros programas para mitigar la situación, como la cosecha de agua.

Desde el MIDA consideran que este es un evento muy importante, en la medida de buscar adaptarse a esa variabilidad climática y de cumplir con la convención marco de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre este tema.

Con el proyecto se intenta ayudar al productor a darles recomendaciones básicas relacionadas con las imágenes satelitales para conocer el estrés hídrico de las plantas, granos básicos y pastos en parte de la ganadería.

La primera fase está dirigida para la administración de la herramienta tecnológica con los funcionarios de los diferentes departamentos de la entidad, incluyendo Informática, Secretaría Técnica, Planificación, Unidad Agroambiental y Cambio Climático, Ganadería y Agricultura.